Año nuevo y vida nueva, o al menos eso asegura el viejo dicho (ese que nos ha tocado escuchar más de alguna vez). Lo cierto es que el año nuevo tiene una mística especial, que nos permite cerrar ciclos y esperar con ansias la llegada de otros 365 días, que por lo general intepretamos como una nueva oportunidad para cumplir sueños y metas. Es por eso que cada 31 de diciembre realizamos una serie de cábalas, a fin de aumentar nuestras posibilidades de lograr aquello que queremos, mezclando superstición con un poco de diversión.
Pero aunque nos planteamos varias metas para la renovación de año, la mayoría de ellas (grandes o pequeñas) suelen quedar en el olvido, ya que no les dedicamos el tiempo necesario, nos aburrimos en el camino, queremos resultados rápidos y no los obtenemos o simplemente preferimos la zona de confort. Sin embargo, para que este 2016 puedas cumplir todo aquello que decretarás para la víspera de año nuevo, ten en cuenta estos tips:
1. No plantearse demasiadas metas
Las
mujeres, por lo general, lo queremos todo y ahora. Sin embargo, el proponerte
demasiados objetivos e intentar cumplirlos todos, sólo te generará
frustración, tensión y estrés. Por lo anterior, lo recomendable es que priorices
y determines cuáles de estos objetivos son más importantes para ti, serán más simples de cumplir y realmente generarán un aporte en tu vida. Si es posible, crea un pequeño plan mental para conseguir tus distintas metas. Concéntrate en objetivos específicos, que sean manejables y que no terminen volviéndote loca en el camino.
2. Proponerse objetivos realistas
Está bien que creas que los anhelos se pueden cumplir, que seas una soñadora y no pierdas la esperanza. Pero cuando se trata de propósitos de año nuevo, tampoco la idea es que recurras a tus anhelos de película romántica, de novela cursi o de películas sobre mujeres que, de la nada, se vuelven populares. Al establecer objetivos para los próximos 365 días, debes hacerlo de manera realista y pensando en cosas que realmente son posibles de cumplir, con trabajo duro, esfuerzo, perseverancia y una pizca de magia femenina. Casarse con un artista pop, ganarse el pozo acumulado de un juego de azar o convertirse en una estrella de Hollywood, no deben estar al comienzo de tu lista.
3. Si es necesario, pide ayuda
Aunque nos creamos secas e independientes, siempre nos vendrá bien una manito. Una buena forma de cumplir objetivos y no distraernos en el camino, es solicitando la ayuda de alguien de confianza. Si quieres bajar de peso, dejar de fumar, encontrar un nuevo empleo o lograr que Cupido te encuentre, conversa sobre tus metas con otra persona y pídele que, cuando te vea a punto de renunciar a ellas, te ayude a retomar el camino de la constancia. Si consigues hallar a alguien que tenga metas parecida a las tuyas, será el doble mejor, ya que podrán plantearse pequeños desafíos e intentar superarlos juntos.
4. Enfócate
A veces, cuando se trata de cumplir propósitos, partimos como "caballo inglés", pero a medida que pasa el tiempo, con suerte nos alcanza para ser mula de carga. Cada día de tu nuevo año debe estar enfocado en concretar tus objetivos, sin desviarte de ellos. No debes dejar que suceda lo que llamamos "conducta de dieta utópica", esa típica mentira que nos decimos a nosotras mismas de "el lunes empiezo la dieta" o comenzar con todas las ganas, pero terminar abandonando los proyectos por falta de compromiso, enfoque y disciplina.
5. Más presente y menos futuro
El futuro es incierto, pero a pesar de que lo sepamos, solemos obsesionarnos con anticiparnos a él. Esta conducta es sumamente negativa a la hora de proponerte cualquier meta, ya que no te servirá de nada tratar de adivinar cuántos avances lograrás en 3 meses, si en un año habrás cumplido todos tus objetivos o si en un par de semanas estarás tan motivada con cumplir tus metas como lo estás hoy. Vive tu día a día y preocúpate de superar los obstáculos paso a paso, sin torturarte o tratando de adivinar lo que vendrá.
5. No te compares con el resto
Otro error, que puede llevar al sabotaje de todas tus metas de Año Nuevo, es la típica y tediosa comparación. Concéntrate en lo que tú quieres lograr, en tus esfuerzos y avances, pero no te pongas a mirar para el lado cada 5 minutos, ya que perderás el rumbo y terminarás frustrada. No sacas nada con torturarte pensando en por qué X persona baja de peso más rápido que tú, por qué tu ex compañera de universidad logró un mejor trabajo o cuál es el motivo por el cual a tu vida llegan puros pasteles, pero tus amigas siempre terminan junto a buenos partidos. Lo mejor es que seas como los caballitos de carrera y te concentres en tu propio camino ¡Mira siempre hacia adelante!
Sin duda, el Año Nuevo es una tremenda oportunidad para dejar atrás lo malo y concentrarnos en vivir mejores experiencias. Aunque esta renovación de ciclo es ideal para plantearse metas, tampoco se trata de que te exijas demasiado y termines cansada, sino más bien de que seas asertiva y comprendas cuáles objetivos son realmente importantes para ti y cuáles de ellos podrás cumplir. Es mejor hacer pocas cosas a la vez - pero ¡bien! - que muchas que no llegarán a ninguna parte.