Mala idea no es, buena idea tampoco. Como siempre, esta situación depende de diversos factores que cada pareja deberá evaluar para saber si grabar un video triple X será beneficioso para la relación o si, a largo plazo, será algo perjudicial que puede terminar sepultando su amor.
Comencemos evaluando los beneficios del porno casero. Primero, sirve para darle una chispa nueva al ring de cuatro patas. Si la acción entre tu hombre y tú ha estado algo baja, fome, “sin brillo”, entonces grabarse podría ayudarlos a poner el motor en marcha. Además, el porno casero sirve para conocernos mejor en la intimidad, corrigiendo algunas posturas y manteniendo aquello que luce bien. En definitiva, puede ser un buen aliado para aumentar nuestra confianza y seguridad.
Y hablando de confianza, el porno casero es una buena idea en el sentido que nos permite confiar más en la persona que tenemos a nuestro lado. Después de todo, grabarte desnuda teniendo sexo es algo sumamente íntimo e implica un gran voto de confianza. Compartir experiencias y probar cosas nuevas une a las parejas y afiata la relación.
Sin embargo, los videos XXX también tienen un costo que es importante evaluar antes de apretar el botón “rec”. El primero y más obvio de todos es que el video se filtre. Ya sea que pierdan el celular o que - sin saber cómo - termine siendo un viral de internet, el porno casero implica un riesgo a su privacidad. Lo que pueden hacer para evitar este tipo de sucesos es borrar el video después de verlo (aunque varios galanes son reticentes a esto).
Otro de los costos de esta idea es que, si el video llegase a filtrarse, la confianza en la pareja se perderá. Además, no lo quiera el Señor, puede ser que tu pololo sea en el fondo un manipulador que no dude en amenazarte y utilizar el video para su beneficio. Nuevamente, este tipo de situación se puede evitar si, por ejemplo, grabas el video en tu celular (y te aseguras de borrarlo después). También es importante que evalúes cuánto conoces a tu pareja y si confías en él, ya que si en el fondo tienes dudas, es mejor no arriesgarse (y se pasadita te preguntas ¡porqué sigues juntos!).
Finalmente, si bien el porno casero puede ayudarnos a aumentar la confianza en nosotras mismas, también la puede destruir. Y es que, la mayoría de las veces, ¡no nos vemos tan regias como Sasha Grey! Por esta razón te recomiendo firmemente que, antes de grabar un video triple X, estés segura de que quieres hacerlo. Si lo haces sólo por complacer a tu pareja, te saldrá caro. Si lo haces a conciencia y con responsabilidad, será una experiencia entretenida que beneficiará tu relación.
Y tú, ¿qué opinas?