Todas tenemos esos días en que no nos gusta nuestro cuerpo. Es natural sentirnos disconformes o inseguras por algún rollito extra o un poco de celulitis en nuestras piernas. Es normal querer hacer dietas para algunos kilos o tonificarnos, sin embargo es importante saber distinguir cuando esto se vuelve una obsesión.
Si sientes que puedes estar sufriendo problemas con la forma en que ves tu cuerpo, con la cantidad de ejercicio que consideras que debes realizar, y particularmente, si pones mucha atención y energía en controlar lo que comes, puedes estar sufriendo un trastorno de la alimentación.
¿Qué es un desorden alimenticio?
De acuerdo al Manual de Diagnósticos y Estadísticas de Enfermedades Mentales (DSM) un trastorno alimenticio afecta a hombres y mujeres, y es tanto psicológico como físico. Se caracteriza principalmente por alteraciones graves de la conducta alimentaria, en que existe un rechazo al peso actual y un deseo por modificarlo.
Son 3 los principales trastornos alimenticios: La anorexia nerviosa, la bulimia y el trastorno por atracón.
¿Cuáles son las señales?
Un trastorno anoréxico, se caracteriza por dejar de comer de forma deliberada durante un tiempo prolongado para perder peso, aun cuando no haya falta de apetito. Algunas señales que pueden indicar que tú puedas estar sufriendo anorexia, o alguna persona cercana, tiene relación principalmente con la falta de alimentación. Una persona anoréxica podría alimentarse con muy pocas calorías y tener una obsesión por contarlas, evitar comer en lugares públicos o en presencia de otros –incluso de su familia–, tardar mucho en comer y hacerlo porcionando repetidas veces lo que hay en su plato, realizar comentarios negativos acerca de su aspecto, y por supuesto, bajar de forma considerable de peso, llegando incluso a considerarse grave.
La anorexia suele confundirse con la bulimia. En esta última, la persona se preocupa por su peso con obsesión, alimentándose la mayor parte del tiempo con comidas consideradas como “saludables” o “bajas en calorías”. Sin embargo, una bulímica de tanto en tanto ingiere cantidades cuantiosas de comida chatarra en periodos muy cortos, eventualmente realizando acciones para controlar su arrepentimiento y “deshacer el daño” que hizo a su peso al comer. Es común que intenten eliminar el exceso de comida mediante laxantes, vómitos o sobre ejercitación. Este trastorno es difícil de reconocer físicamente ya que usualmente no se manifiesta perdida notoria de peso debido a los episodios en que come mucho alimento, sin embargo emocionalmente, una persona bulímica suele sentirse deprimida, culpable y poco valiosa.
El trastorno por atracón (o BED por sus siglas en ingles que significan Binge Eating Disorder) es el trastorno alimenticio menos conocido, pero el más común en el mundo. Se cree que afecta a un 3% de las mujeres estadounidenses, siendo una causa de obesidad. El trastorno por atracón es similar a la bulimia, es decir, existen periodos cortos de “atracones” en que la persona come muy rápido y sin prestar atención a si está satisfecha, para luego entrar en un estado de arrepentimiento. Sin embargo, en este caso no existe conducta compensatoria, lo que conduce al aumento de peso. Algunas señales del trastorno por atracón son comer a escondidas, comer grandes cantidades (anormales) de calorías, comer hasta sentirse enfermo, sentir vergüenza mientras se come, y sobre todo, la sensación de pérdida de control sobre lo que se ingiere.
¿Por qué me está ocurriendo esto?
Son muchas las razones que pueden llevar a un trastorno de la alimentación. Puede estar dado por una experiencia traumática o incluso genéticamente. Es importante saber, que si estas sufriendo de un desorden alimenticio, no debes buscar culpables. Si, puede que alguien te haya hecho daño, sin embargo este es un problema para el que tienes la capacidad de superarlo y salir de él.
¿Qué tengo que hacer?
En primer lugar, busca el apoyo de un familiar o amigo. No tienes que lidiar con esto por ti misma. No tengas miedo de consultar a un psicólogo o psiquiatra, ya que tratamientos para estos problemas existen y muchos.
Recuerda también, que los trastornos alimenticios, empiezan por un deseo de controlar tu peso. En especial la bulimia y el trastorno por atracón ocurren porque durante mucho tiempo hubo control excesivo del peso de forma exagerada e inflexible, reduciendo de modo considerable las calorías ingeridas diariamente y por supuesto, malnutriendo tu cuerpo. Debido a que nuestro cuerpo es sabio, llega un momento en que intenta hacerse escuchar, y demanda que nos alimentemos.
La mejor forma de combatir este gran problema es, como sociedad, deshacernos de la cultura de la dieta que alimenta conceptos y estereotipos físicos y de “bienestar” falsos y poco realistas. Aceptarnos como somos parece ser la mejor solución.
Si sientes que estás padeciendo uno de estos problemas puede ser difícil creer que te recuperarás, pero con ayuda profesional y apoyo profesional, lo lograrás, y sin duda saldrás adelante.
¡Eres fuerte y no estás sola!