La nomofobia es el miedo irracional e incontrolable a salir de casa sin el celular. Ésta palabra corresponde a una abreviatura de la expresión en inglés “no-mobile-phone-phobia” y fue acuñada en el año 2011, durante un estudio llevado a cabo en Reino Unido.
Si sientes una gran ansiedad cuando te quedas sin batería en el celular, te crispa los nervios quedarte sin señal o te quieres morir cuando no encuentras a tu regalón en la cartera, ¡entonces ojo al charqui, querida amiga! Pues este trastorno lo sufre al menos la mitad de la población. Y es que no es muy sano que todo nuestro mundo dependa de un artefacto electrónico; sin embargo, hemos dejado que así suceda.
Déjame que te pregunte: ¿qué harías tu teléfono celular se quedara en el velador de tu casa? ¿Te devolverías a buscarlo, porque no soportas la idea de estar todo un día sin él? ¿Rechazaste salir de viaje porque te quedarías sin señal? ¿Te desespera el solo pensamiento de estar desconectada de tus amigos, tu familia, tu jefa, y ese chico que conociste el otro día en la disco?
¡A mí también! Pero vamos, que tenemos que hacer algo al respecto. El alto grado de dependencia hacia nuestro móvil no es sano en ningún sentido, y puede limitar nuestra vida de muchas maneras. Comenzamos a girar en torno a nuestro celular y nos sentimos completamente incomunicadas sin él. Puede ser que estés en pleno almuerzo con tus amigas, pero si no tienes tu celular a tu lado, es igual a estar ¡totalmente sola!
La crítica a los celulares ya es muy conocida: en vez de compartir con la persona que tenemos al frente, nos quedamos pegadas en la pantalla del pequeño aparato chateando con alguien más. Y lo más grave es que enloquecemos ante la posibilidad de que no sea así. Nuestro corazón se acelera, nuestra cabeza no para de dar vueltas y nos duele el estómago. Nos sentimos inseguras, estresadas y angustiadas. ¡Si hasta dentro de la casa llevamos el celular a todas partes!
El trastorno de la nomofobia te desconecta de la realidad de carne y hueso. Dejas de estar presente si no estás completamente segura que tu celular está cerca y funcionando como corresponde y, aún si lo hace, lo revisas tantas veces que te pierdes la emocionante historia de Juanita y su nuevo novio. ¡Mucho cuidado! Debes poner un límite al tiempo que pasas conectada en tu teléfono móvil.
Y tú, ¿te sientes fatal sin tu celular?