La sexualidad es un tema importante para la mayoría de las personas. Ya sea que estemos en pareja o solteras, es fundamental conocer nuestro cuerpo y satisfacer nuestras necesidades íntimas. ¿Pero qué sucede cuando no logramos este objetivo? ¿Cuáles son las consecuencias de la insatisfacción sexual?
Cuando no logramos experimentarla, comenzamos a preocuparnos. Podemos culpar a alguien más de esta situación, pero generalmente nos responsabilizamos nosotras mismas. Entonces nuestro estado de ánimo puede sufrir una “baja”, y sentirnos tristes, deprimidas y frustradas. ¿Habrá algo malo con nosotras? Nos comenzamos a sentir ansiosas ante cada encuentro sexual, o ante la falta de éstos.
En el caso de que nos encontremos en pareja y no logremos sentirnos satisfechas en la alcoba, podemos acumular resentimiento hacia nuestro galán. Nos sentimos desilusionadas, y nos volvemos frías y distantes en la relación. Es muy común experimentar un vacío después de tener relaciones sexuales, y toda esta situación puede desembocar en una infidelidad o posible separación.
La insatisfacción sexual disminuye el placer que sentimos, y ya sea que estemos solteras o no, comenzamos a evitar los encuentros íntimos. Nos invade el enojo y la inseguridad, ¡pues no logramos sentirnos complacidas! Como consecuencia de esto podemos empezar a beber más, a fumar más o a comer comida chatarra en exceso, ya que intentamos evitar el malestar que sentimos. Y no sólo ganamos unos kilitos extra, ¡sino que nos sentimos fatal durante el día!
Además, en el caso de que te encuentres en pareja, la falta de satisfacción en la alcoba disminuye la confianza mutua y estanca el crecimiento sexual. Cuando este problema alcanza largos períodos de tiempo, puedes notar que tu cabello se torna opaco y que tu piel se reseca.
No dejes pasar más tiempo y habla con tu pareja respecto a cómo te sientes. Si te encuentras soltera, tampoco te dejes estar: hoy en día existen muchas opciones entretenidas para que te puedas satisfacer sexualmente, sin necesitar un compañero a tu lado.
Y tú, ¿qué opinas al respecto?