Existen diferentes diseños constantes en la ropa, que muchas veces cuesta combinar de manera que favorezca a tu figura. Las rayas anchas o delgadas, horizontales o verticales son protagonistas de este problema. Saber cómo usarlas puede ser una gran ayuda y en Fucsia te lo explicaremos. Ve a tu clóset y saca todas las prendas a rayas que tengas, porque ahora sabrás cómo mezclarlas.
Tipos de rayas
Verticales: Si eres una mujer delgada, no debes usar rayas verticales. Si te consideras un poco más rellenita, este estampado te ayudará a disimular un par de kilos, siempre y cuando procures que la distancia entre una y otra no sea demasiada o éstas no sean muy anchas. Si eres bajita, las rayas verticales crearán el efecto visual de que eres más alta.
Horizontales: Este tipo de rayas sí son para las delgadas. El efecto horizontal hará que tu cuerpo se vea más voluminoso. Por lo mismo, las mujeres más rellenitas deben evitarlas.
Diagonales: Sirven para todas las mujeres que deseen evitar que se note la guatita. También ayudan a ocultar o disimular un poco el tamaño del busto.
Ahora encontramos las rayas en todas las prendas habidas y por haber. Pero es importante que tengas en cuenta algunos consejos: si vas a usar pantalones con rayas, debes ser una mujer con piernas delgadas. El efecto de éstas en los pantalones es diferente que en las poleras. Y recuerda también que si llevarás rayas en la parte inferior, tu polera o top debe ser de un solo color.
Si quieres usar un vestido o falda con rayas, es mejor que éstas sean diagonales o asimétricas. De esta manera podrás usar un vestido ajustado o suelto, disimulando el busto y la barriga. Si eres delgada, utiliza un vestido con rayas horizontales. En cuanto a las verticales, ciertamente hay que ser muy osada para llevarlas en este tipo de prenda, ya que pueden ser perjudiciales para cualquier tipo de cuerpo.
Las rayas blancas y negras o blancas y azul marino son un clásico. Estos colores van con todo color de piel y cabello. Pero si quieres ser más jugada y usar otros colores, intenta no mezclar más de tres. Así evitarás estar muy recargada.
Y tú, ¿te atreverías con las rayas?