Vivir juntos es un paso que muchas parejas dan tarde o temprano. En cambio, "casarse" es un paso que cada vez menos lo dan. Sea cual sea tu situación, por mi parte, prefiero convivir antes que contraer matrimonio. Sé que uno debe vivir las situaciones para saber si le acomodan o no, pero considero que la unión nupcial está muy lejos de responder a las necesidades reales de una pareja.
A continuación, repasa estos 5 motivos por qué prefiero convivir antes que casarme.
1. Es un acto espontáneo y sincero
Cuando uno decide vivir junto a su pareja, normalmente esta situación "se va dando". Pocas veces existe una petición formal de por medio; la mayoría de las situaciones comienzan porque uno de los dos pasa mucho tiempo en casa del otro.
2. No existe la presión social del matrimonio
Lamentablemente, el matrimonio no sólo se trata de amor. La sociedad se ha encargado de atribuir significados extras a esta unión, estableciendo reglas de comportamiento masculino y femenino, en donde la mujer toca la peor parte.
3. Te desligas del sentimiento de "propiedad"
Si bien es verdad que existen parejas que viven en una verdadera "cárcel" o "infierno" sin estar casadas, el matrimonio es automáticamente un sinónimo de propiedad, en donde la libertad de cada uno pasa a segundo plano.
Ser "libre" no significa ser infiel, loco o mala persona: es respetar los espacios del otro entregándole tu confianza a través de la comunicación. Cuando dices que alguien es "tuyo", éste pasa a ser visto como propiedad y no como un ser individual.
4. Hay mayor respeto de los espacios y de la individualidad
En la misma línea que el punto anterior, al no sentir que tu pareja está "obligada" a estar contigo, procuras tener un mejor trato con ella/él, en donde respetas sus espacios. Convivir no requiere contratos escritos, solo promesas personales.
5. Se está juntos por amor, no por obligación
Si ya no existe amor, es más fácil separarse conviviendo que estando casados. Esta situación te permite ser más sincero y no continuar una relación que no te satisface sólo porque te aterra pensar que "tu matrimonio fracasó" o que "tienes un contrato que cumplir".
Y tú, ¿prefieres convivir o casarte?