Hay diversos problemas que se pueden experimentar en la vida de pareja, y la solución a estos depende de la voluntad que pongan ambas partes en llegar a un consenso. Sin embargo - a mi modo de ver, y creo que de una gran mayoría - existen algunos puntos que no se pueden dejar pasar y que exigen poner un punto final a la relación. Y son los siguientes:
1. Infidelidad: creo que este asunto no tiene justificación. No hay excusa que valga cuando se lacera la confianza de ese modo. Burlarse de una persona junto a la que escogiste estar (a no ser que pertenezcas a otra cultura y sea “un acuerdo familiar”) me parece, por decir lo menos, cobarde y bajo. Si dudas respecto de tus sentimientos, lo mínimo es ser honesto y contar lo que pasa. Pero pasearte de la mano de dos personas distintas en el mismo periodo, creo que es innecesario, poco transparente y absolutamente desleal. Si hay algo que nos diferencia de los animales, que actúan por instinto, es el criterio. Nadie merece eso. Y, ¿qué tipo de relación se podría construir después de tamaña falta de respeto y confianza? Next, de inmediato.
2. Agresiones físicas: absolutamente inaceptables. Una persona que llega a perderte el respeto hasta ese punto, poniendo en entredicho tu integridad, no merece tu tiempo ni compañía. Este tipo de conducta bordea en lo criminal y no tienes por qué aceptarlo. Si vives una situación similar, ¡despierta!. Date cuenta de que eres valiosa, ¡y mucho!. Pide ayuda y bajo ningún concepto justifiques una actitud que no tiene nombre. Somos personas y nos entendemos hablando. Si quien te acompaña no responde a la lógica ni a los argumentos, es una bestia, que debe estar en su jaula y no contigo. Busca ayuda de inmediato.
3. Maltrato psicológico: es un tema a que debes estar muy atenta, pues es propio de personalidades manipuladoras, extremadamente inseguras y algo perturbadas. Si en lugar de brindarte apoyo o manifestarte admiración, tu pareja vive criticando en duros términos tu forma de actuar o vestir; formula comentarios desagradables en torno a tu aspecto físico e incluso llega a insultarte, debes decirle adiós de inmediato. Alguien que te quiere, te respeta y siempre propenderá a nutrir tu mundo a través de comentarios constructivos. Si lo que él busca es “apocarte” y mermar tu autoestima, estás frente a un vampiro emocional en el cual no debes invertir tu tiempo. Dale el sobre azul y de paso, la tarjeta de un buen loquero.
4. Falta de amor: aunque muchas declaman románticamente que con sus sentimientos basta y sobra para ambos, lo cierto es que aceptar la compañía de quien - en forma directa - ha declarado que no te quiere o que “no está preparado para una relación formal”, evidencia una tremenda falta de amor propio. ¡Y tú eres valiosa! No tienes por qué aceptar las migajas de un malcriado que no sabe para dónde va en la vida. A no ser que estés en plan de “cero rollos”, pon atajo a aquellos especímenes que te ven como un juguete. Mil veces mejor sola que mal acompañada; y - aunque suene a verso - “guarda tu corazón para otra ocasión”.
Y tú, ¿qué otro punto agregarías?