5 motivos por los que no debes engañar a tu pololo

En menor o mayo grado, muchas personas "miran para el lado" en algún punto de su relación. ¿Las razones? Carencias, calenturas, amor... incluso algunas que ni siquiera el propio involucrado entiende. Sin embargo, antes de que esa "mirada" se convierta en un lazo emocional o físico, es bueno qué pienses bien tus acciones.

A continuación revisa estos 5 motivos por los que nunca debes engañar a tu pololo/a con alguien que te guste.

1. Te desvaloras como persona

Piensa en qué cosas te has comprometido y que has prometido. ¿Alguna vez hablaste de la importancia de la fidelidad y la verdad? Fíjate bien en tus palabras, porque si no fuiste capaz de reconocer que el ser humano se equivoca y reprochaste este tipo de situaciones, el hecho de cometer estos actos sólo te desvalorará como persona.

2. La verdad siempre se sabe

Para quienes disfrutan de las "aventurillas" o suelen realizar cosas fuera de la relación que van en contra de los patrones acordados, les tengo una mala noticia: la verdad siempre termina por ver la luz, tarde o temprano. Si tienes miedo de que te "pillen", hay altas probabilidades de que lo hagan, por muy discreta que seas. Recuerda: este secreto no es solo tuyo, es del otro también.

3. A ti no te gustaría que te hicieran lo mismo

Antes de hacer o decir cualquier cosa en tu relación, piensa: ¿te gustaría que te hicieran lo mismo?, ¿qué harías si tu pololo/a te pusiera el gorro? Ponte mil veces en su lugar antes de hacer cualquier cosa, porque luego no podrás quejarte si te pagan con "la misma moneda".

4. No vale la pena botar una relación por una calentura

El cuerpo humano suele tendernos trampas terribles y hacernos caer en situaciones que nuestro cerebro nos impediría tajantemente. Por otra parte, si logras romper el tabú y engañar a tu pareja una sola vez, es muy posible que lo hagas de nuevo.

5. Si tienes muchas ganas de engañarlo, mejor termina

Lo más difícil, pero lo más sensato: nadie quiere perder "pan ni pedazo". Si te gusta más e"otro" o realmente amas a tu pololo, decídete por un lado. Si de verdad tienes muchas ganas por probar labios ajenos e involucrarte con la otra persona, hazlo, pero antes termina.

Recuerda, el amor debe ser siempre ¡sin daños a terceros!. Reflexiona y sigue el dictado de tu corazón, procurando ser lo más honesta y recta posible con aquel a quien un día juraste fidelidad. Seguro tú esperarias lo mismo, ¿o no?.