Lo que para muchas de nosotras sería un terrible descuido, hoy se vuelve más que moda. La tendencia #SinMaquillaje ha venido a tomarse las redes sociales, propagándose sin reparos y con mucha originalidad entre las chilenas.
La iniciativa comenzó gracias a una carta escrita por la mismísima Alicia Keys –un icono de la música y ganadora del Grammy-, quien hizo pública su sensación respecto al maquillaje y los ideales de belleza, por medio de extensas letras en el portal Lenny.
“Empecé, más que nunca, a parecer un camaleón. Nunca era del todo yo misma y estaba cambiando constantemente para que los demás me aceptaran”. “Se lava el cerebro de las mujeres para creer que necesitamos estar delgadas, sexies, deseables o perfectas” “Cada vez que salía de casa estaba muy preocupada de si no llevaba maquillaje”, son algunas de las potentes frases que la misiva contiene, pensamientos de los que se fue liberando luego de que para una entrevista le tomaron fotos finalizando su rutina de gimnasio.
Si bien la decisión no fue fácil - hubo profundos cuestionamientos personales, dirigidos a lo que sus fans podrían decir -, la resolución fue el mejor de los aciertos. “Una vez que comencé a posar sin maquillaje, me sentí libre y hermosa (...) Decidí quedarme con esta imagen sin maquillaje y convertirla en un mantra personal (...) No quiero maquillarme más. Ni mi cara, ni mi mente, ni mi alma. Tampoco mis pensamientos, ni mis sueños, ni mis luchas, ni mi crecimiento emocional. NADA”.
Este simple pero decidor hecho, ha cambiado mentalidades en todo el mundo. No sólo por evitar el maquillaje –en contra de toda campaña-, sino, por la aceptación propia que trae el mostrarnos tal cual somos frente al mundo. “Al natural” se ha masificado como una extensión de la femineidad, del encanto nato de la mujer, de la belleza fuera de los cánones de la moda y de los tutoriales que te convierten en otra, para reflejar quién se es en verdad.
Esta serie de favorables consecuencias es en sí misma el motivo de esta gran revolución sin maquillaje, la que ha abierto no sólo los poros de miles de caras, sino los ojos a muchas que ya estaban cansadas del juicio de otras mujeres y de la engañosa publicidad de rostros perfectos y sin expresión.
Libre, feliz y llena de seguridad, es lo que Alicia Keys declara vivir con este tremendo cambio de mentalidad.
¿Hacemos la prueba?