Cuando Diana Bolocco apareció pantalla en el programa "Locos por el baile" (hace 10 años), su voz "desagradable", entre ronca y chillona, hacía difícil presagiarle un buen futuro televisivo. Parecía que la hermana menor de nuestra única Miss Universo era una "aparecida" sin talento, que aprovecharía su minuto de fama para figurar a la sombra de Cecilia. A pesar de las despiadadas críticas, Diana tuvo su oportunidad en Alfombra Roja, programa de espectáculos que conducía junto a su actual marido, Cristián Sánchez, a quien conoció en el programa.
Nadie recuerda bien cómo su otrora voz de pito comenzó a suavizarse (¿o quizás no?), y la gente empezó a reconocerla por su talento, destacando la simpatía y naturalidad con las que (en mi opinión) supera con creces a Cecilia.
Sin embargo, Diana tuvo que soportar por años el ser conocida como "la hermana de", y es mérito absolutamente propio el haberse sacado finalmente ese estigma. Hoy, la gente la quiere y la respeta, posee un sello propio de espontaneidad, es graciosa y divertida. Todo esto le ha valido el ser considerada una de las mejores animadoras de la TV chilena. Han sido su cercanía con la gente, y el desenfado de reírse de sí misma, las cualidades que el público más ha valorado. Además, es innegable la complicidad que existe entre ella y su partner Martín Cárcamo, formando una dupla querida por todo el mundo.
Si bien no posee la voz más armónica del mundo, ¡qué importa, la queremos tal cual es!. Amamos a Diana por ser natural y sin aditivos, condiciones con las que ha ganado ¡su propio y especial espacio!.
Y tú, ¿también admiras su simpatía?