Te buscó por mucho tiempo y pese a todas las trabas que le pusiste, terminaste por rendirte en sus brazos y encariñarte con él. Todo iba bien hasta que empezaste a notar que las decenas de "likes" que daba a tus fotos, se redujeron a ninguno. Ya no te buscaba ni demostraba interés en salir contigo y, peor aún, dejó de contestar tus mensajes o, simplemente, de hablarte.
¿Qué hacer cuándo notas desinterés en alguien que te gusta? Antes de tomar cualquier tipo de decisión, debes tener en claro qué sientes por la otra persona. Ten en cuenta que si no logras controlar o conocer tus propias emociones, es difícil que puedas descifrar las de la otro. Para ello, evalúa el tiempo que estuvieron juntos (a veces creemos enamorarnos en tan sólo un par de semanas), junto a lo que más te agrada y disgusta de su carácter.
Si realmente te percatas que no te gusta nada objetivamente y estuvieron poco tiempo "juntos" (por muy "fogoso que haya sido"), es poco probable que lo ames. Quizás la intensidad de los sentimientos que esa persona tenía acumulados fueron tan fuertes al expresarse que te dejaron confundida. Para ello, dale tiempo al tiempo y aléjate un poco de su recuerdo, a fin de poner en calma tus emociones.
Ahora, si en verdad te gusta y sientes ese sabor amargo que deja una "pérdida", el asunto es más complejo. Ten en cuenta que si te sientes demasiado triste o lloras mucho por su actitud indiferente, no siempre se trata de amor. A veces los procesos hormonales nos juegan una mala pasada, o las micro-dependencias que uno crea en pocos días. Nuevamente, reitero que es importante dejar que pase un poco el tiempo.
Por otra parte, ¿qué pasa con él? Cuando alguien deja de hablarte -después de haber demostrado tanto interés por ti, hasta que lo "pescaste"-, puede suceder por dos motivos. El más evidente y difícil de admitir, es que ya no le gustas: ya te obtuvo, cumplió su objetivo y sigue por otra meta. También puede ser que te tenía idealizada y, al conocerte, no eras lo que esperaba.
Además, existen personas que se esmeran por concretar algún tipo de contacto físico (besos, caricias, relaciones sexuales) y, una vez alcanzados, pierden totalmente el interés. En este caso, te recomiendo dar un paso al lado y ser fuerte de decirte a ti misma: "no me quiere". Es duro, triste, terrible... pero es verdad. No tiene sentido llevarle fe a este tipo de relaciones, saldrás herida de todas formas.
El otro motivo, menos recurrente -pero posible de todas formas- es que tenga miedo. Imagínate: estuvo mucho tiempo pensando en ti y al fin puede estar contigo. Esto puede generar inseguridades que se escudan en huir o evitar situaciones, para no mostrar lo vulnerable que se siente. También es posible que huya si tú estás emparejada o si eres demasiado fría.
En este contexto, se debe considerar que lo mejor es hablar las cosas y explicarle que a ti también te gusta mucho, pero que huyendo solo logrará alejarte. De todas formas, estos casos son poco probables, así que es importante que evalúes la situación.
Finalmente nunca olvides que "esa" persona no es la única en el mundo y que cada experiencia sirve para crecer y no volver a tropezar con la misma piedra una vez más.