La mayoría de nosotras tiene en su joyero alguna pulsera, anillo o dije de alguna piedra en particular, preciosa o semipreciosa. Pero muchas ignoramos que éstas traen beneficios a nuestro estado anímico y a la salud, ¡sí, aunque no lo crean!. Esta sanación física y espiritual a través del uso de piedras se llama gemoterapia.
La gemoterapia se encuentra dentro de las terapias alternativas esotéricas, y lo que busca es lograr un bienestar a nivel mental y emocional a través del uso de gemas, cristales, piedras preciosas o semipreciosas, los cuales actúan emitiendo energía con sus "poderes" particulares. Cada signo zodiacal posee su piedra - o más de una-, pero cada persona puede utilizar la que desee, según lo que necesite sanar o solucionar.
Hay muchísimos tipos de piedras (ópalo, granate, aguamarina, rubí, esmeralda, aventurina, lapislázuli, ágata, y un largo etcétera) por lo que hablar de las características de cada una sería bastante tedioso. Mencionaremos entonces las más comunes y sus propiedades.
1. Amatista: es morada/lila/transparente Es un tipo de cuarzo que, como su color lo indica, ayuda a la transmutación de la energía negativa en positiva (el púrpura es el color de la transmutación). Propicia la apertura de la conciencia y la verbalización de los problemas. Limpia el aura y clarifica la mente. También se dice que es útil para controlar las adicciones en general. Corresponde al chakra de la coronilla, y es una piedra lunar.
2. Cuarzo rosado: es la piedra del amor, abre el corazón al amor propio y además lo atrae. Otorga una sensación de bienestar y tranquilidad a quien la lleve. Es ideal para personas con problemas para concebir, para el estrés y para problemas al sistema circulatorio y pulmones. Perfecto para situaciones de duelo o estrés. El cuarzo rosa se carga bajo la luz de la luna durante una noche (recomendado también para la piedra luna y la selenita) y beneficia a todos los chakras.
3. Cuarzo transparente: podríamos decir que éste es el cuarzo madre, ya que potencia las propiedades de todas las otras piedras. Disipa la energía negativa atrayendo la positiva, es un sanador a todo nivel y también beneficia a los 7 chakras. Armoniza y equilibra, y alivia todo tipo de dolores.
Para limpiar tu piedra recién adquirida -comprada o recibida de alguien- espera la llegada de la luna menguante, y ponla en un recipiente rodeada de cuarzos transparentes o hematites, bajo la luz de la luna toda la noche.
Debes limpiar tu piedra cada cierto tiempo, pues se cargará de tu energía negativa que pueda llegar a absorber. Puedes ponerla bajo el agua de la llave durante algunos segundos, sumergirla en agua tibia con pétalos de rosa durante la noche, o cubrirla de sal de mar (ojo, que el método de limpieza dependerá del tipo de piedra).
Para cargar tu piedra puedes ponerla al sol (la amatista puede decolorarse, y como es una piedra lunar, para ella no es recomendable este método) o bajo la luz de la luna, enterrarla durante 24 hrs -dejando marcado el lugar para que no se te pierda-, e incluso luego de limpiarla puedes cargarla tú misma, tomándola con ambas manos y concentrando toda tu energía positiva en ella, tus deseos, e imaginando que una luz blanca la rodea mientras se carga.
Claramente la gemoterapia no es una ciencia exacta, pero como toda terapia alternativa, depende mucho de nuestra propia energía y confianza. Así que, si te gustan las piedras y crees que pueden ayudarte con tus problemas emocionales y físicos, no dudes en llevar contigo uno de estos hermosos cristales.