¿Te cuento qué es la migraña para mí? Es como tener una bomba a punto de explotar o un reloj que hace tic tac todo el rato. En el peor de las casos, es como la sensación que produce el sonido de unas largas uñas en una pizarra. Ahora, en términos médicos, es un dolor de cabeza muy fuerte, que suele afectar un lado de ella y, en ocasiones, aparece con náuseas y vómitos. ¿Te ha pasado? Seguramente sí, porque la migraña es dos veces más frecuente en las mujeres que en los hombres debido a influencias hormonales, según lo indica la Organización Mundial de la Salud (OMS).
A mi me pasa muy frecuentemente, más de lo que quiero y puedo soportar. Lamentablemente, es una patología recurrente y que generalmente dura toda la vida, (como lo señala la OMS), debido a que no tiene cura definitiva, sólo tratamientos para controlarla y disminuir la frecuencia en que aparecen. Pero como tengo años en esto, me gustaría compartir algunas de los tips que me funcionan para sobrellevarlo.
La mejor manera de tratar una migraña es evitando su aparición o al menos disminuyendo la frecuencia con la que se presentan. Para eso, mis recomendaciones son:
Visita un especialista: esto es lo primero que debes hacer, puede ser a un internista o directamente a un neurólogo. Ellos confirmarán tu diagnóstico, aclararán tus dudas e indicarán el mejor tratamiento.
Lleva un diario: en un cuaderno, detalla cuándo se presentó el dolor de cabeza, qué tomaste, cuánto tiempo duró, que habías hecho o comido antes de que se presentara y cualquier otro detalle que te permitas identificar patrones.
Cada migraña es distinta: descubre cómo es la tuya, cuándo sucede y por qué. Por ejemplo, yo descubrí que si paso mucho tiempo sin comer me da migraña seguro, así que ahora no me salto ninguna comida.
Evita lo que te produce dolor: hay algunas cosas y alimentos que favorecen la migraña, como el chocolate, el tomate, la soya, el queso, el vino tino, los olores, ruidos y luces fuertes, entre otros que menciona el portal Geo Salud. De todas maneras, no todos los productos afectan de la misma manera, por eso que coloqué arriba que cada migraña es distinta, pero una vez que identifiques los productos que te la provocan, evítalos a toda costa, aunque sea difícil.
Lleva un estilo de vida saludable: en la medida en que mejor comas y más activa estés, estarás menos propensa a migrañas fuertes; así que quizá ésta sea la excusa para motivarte a comer sano y hacer ejercicio.
Si no lograste evitarla y simplemente apareció, también te doy algunos tips sobre cómo controlarla:
Toma el tratamiento a tiempo: por lo general, los tratamientos tienen mejores resultados si se toman cuando la migraña está empezando. Una vez que sientas que te está doliendo la cabeza, lo mejor es que tomes el tratamiento indicado por tu doctor.
Date un baño: a mí siempre me ha funcionado darme un baño con agua tibia. Por alguna razón, cuando el agua cae sobre mi cabeza y me relajo, el dolor disminuye.
Vete a un sitio oscuro: por lo general, la luz natural o artificial fuerte produce que el dolor de cabeza aumente; así que lo mejor es irse a la pieza y apagar la luz. Si no puedes hacerlo, te recomiendo que te tomes unos minutos y te tapes los ojos con un suéter u otro tipo de tela que tengas a la mano.
Bebe mucho líquido: en ocasiones, el dolor de cabeza se debe a la deshidratación, así que es importante mantenerse tomando líquidos para ayudar a disminuir el malestar.
Utiliza una compresa fría: también sirve colocar paños fríos en la zona donde duele la cabeza. Si no tienes una, puedes usar un poco de hielo u otro congelado.
Pastilla y a dormir: el descanso es fundamental. Muchas veces me tomo la pastilla que me indicó mi doctor y me voy a dormir. Casi siempre amanezco al día siguiente sin molestias.
Éstas son algunas de las cosas que me han funcionado, por eso no dudo en compartirlas: quizá a ti también te sirvan. En cualquier caso, lo mejor es que revises tu caso particular y tomes las recomendaciones que mejor te sirvan. El Dr. Patricio Ruedi, neurólogo de Clínica Las Condes señala que: “Las jaquecas pueden ser muy invalidantes, sobre todo si el dolor aparece con mucha frecuencia y afectan severamente las actividades normales de las personas”; por eso es importante entender el padecimiento que tenemos y poner todo de nuestra parte para lograr sobrevivir a la migraña.