Cuando tenemos días estresantes que nos dejan con la bala pasada, es probable que sientas que tienes demasiada energía recorriéndote; y esto puede afectar tu apetito, tu sueño y tu humor.
Para que puedas dormir tranquila, te sugiero algunas actividades que me han ayudado en el pasado:
1. Pegarle a algo (como un cojín).
Si lo que sientes es rabia, tal vez por alguna injusticia que pasó en el trabajo, o porque tuviste uno de esos días en que todo sale mal; es buena idea descargarte contra algo que no se rompa fácil. Toma un cojín e invoca a tu Mike Tyson interior.
2. Cantar con audífonos a todo pulmón.
Ya sea porque tienes rabia o pena, la música tiende a ayudarnos a regular nuestras emociones. Dicen que el rock pesado nos calma, mientras que las canciones tristes nos ayudan a llorar y así deshacernos de la pena. Pon tu lista de Spotify preferida y canta hasta que te sientas mejor.
3. Bailar en tu pieza al ritmo de tus canciones favoritas
Si no sientes rabia, ni pena, si no más bien estás feliz por algo bueno que te pasó, pon tu música preferida y ¡baila!
4. Tomar un té de melisa.
Si lo que sientes es estrés puro y duro, o un ataque de ansiedad (sobre todo si tienes algo importante que hacer al día siguiente), el té de melisa es conocido por ser un analgésico natural, que además relaja el sistema nervioso. Una taza calientita y dormirás como un lirón.
5. Hacer algo relajante que te distraiga.
Si eres más de hacer manualidades, sugiero una actividad relajante como pintar mandalas. Esto te ayudará a concentrarte en algo distinto de lo que te preocupa. Otras alternativas podrían ser dibujar, tejer o bordar.
Es bueno reconocer cuando necesitamos algo de ayuda para sentirnos mejor. Si la ansiedad te supera, o es mucho el estrés o la rabia que sientes, lo mejor es consultar un especialista. Pero si es algo aislado, estas alternativas te ayudarán a liberarte un poco.