Llevar un estilo de vida saludable es muy sencillo de lograr si te enfocas en pequeños cambios de hábito y los haces durar en el tiempo. Además de entregarte muchos beneficios físicos, te sentirás mucho más optimista y feliz. ¿Te atreves a ponerlos en práctica?
1.- Mantén una correcta higiene del sueño:
Con esto no sólo nos referimos a dormir las ocho horas mínimas recomendadas, sino a mantener una rutina de sueño que no varíe mucho diariamente. Lo ideal es descansar entre 8 y 10 horas cada noche, nunca dormir menos de 7 ni más de 12, aunque no lo creas eso también termina siendo negativo y amanecerás más cansada. Es importante que la hora en la que te vas a la cama sea siempre la misma, al igual que el momento de despertar.
Y no es lo mismo amanecerte hasta las 4 de la mañana y luego dormir ocho horas, el sueño idealmente debe producirse en la noche, ya que son cientos los procesos y las hormonas que trabajan cuando se pone el sol, el descanso será más fructífero y tu salud mejorará considerablemente, si es que aún no mantienes una rutina de sueño correcta.
2.- Desayuna todos los días temprano:
Sí, este punto lo lees a cada rato, pero ¿realmente lo llevas a cabo? Luego de pasar un ayuno prolongado de al menos diez horas, tu cuerpo necesita activarse y llenarse de energía para comenzar el día. Debes llevar algo a tu estómago máximo una hora luego de despertar, para que así mantengas tus niveles de insulina estables durante toda la jornada. Si te saltas el desayuno, además de que no rendirás bien el resto del día, harás que tu metabolismo se ponga más lento, tu concentración disminuirá, sentirás mucha ansiedad en la tarde debido a la falta de proteínas y correrás el riesgo de sufrir síndrome metabólico e incluso diabetes. No te queremos asustar, pero ¡corre a prepararte un gran desayuno!
3.- Consume frutas y verduras:
Comer poco no es sinónimo de comer bien y si quieres llevar una vida saludable mujeres, las frutas y verduras deben ser una prioridad en tu día a día. Si no te apetecen o te cuesta incluirlas en tu menú, opciones sencillas son prepararlas en smoothies por la mañana (con este calor, ¡será una idea deliciosa!), agregar pequeñas ensaladas antes del almuerzo, cocinar sopas para la noche o hacer tortillas con tus vegetales favoritos. Haz el intento, ¡no cuesta nada!
4.- ¡Muévete y disfrútalo!
No hay nada más tedioso que obligarse a ir al gimnasio cuando no es lo que realmente te gusta, pero para llevar una vida saludable mujeres, debemos cambiar nuestros hábitos sedentarios por unos más activos. Esto no significa que te debes torturar haciendo algo que no te guste, simplemente agrega actividades que disfrutes que no sean revisar Instagram o ver Netflix.
Prueba distintas cosas hasta que encuentres lo tuyo. Puede ser realizar trekking los fines de semana, ir a clases de pilates, de baile, andar en bicicleta, incluso sal a vitrinear si eso te sirve para caminar un par de horas. ¡Todo suma! La idea es ser constante y que el movimiento sea parte de tu día.
5.- Fuera el estrés:
En estos tiempos, parece que el estrés está subvalorado y creemos que es normal sentirnos agobiados todo el tiempo y no es así. Una de las principales razones por las cuales no podemos llevar una vida saludable mujeres es porque no lidiamos con las presiones diarias a las que nos sometemos y las ignoramos, al igual como lo hacemos con nuestros hobbies y verdaderas pasiones. Combatir el estrés no es tan difícil como piensas, basta con que retomes esas pequeñas cosas que te hacen feliz y sentirte desconectada, como puede ser pintar, ir a leer a tu parque favorito o incluso hacer ejercicios de respiración en cualquier momento que puedas. Cierra los ojos, inhala inflando el estómago, retén unos segundos y luego exhala. Este simple gesto puede ser de gran ayuda y si lo conviertes en un hábito, mejor aún.
Estos cinco consejos son capaces de cambiar por completo tu estilo de vida. ¡Ponlos en marcha y nos cuentas qué tal!