Cosas de loca: dormir con 6 almohadas

Rebeca Parra Aug 7, 2016
Compartir:

Yo y mi pequeña obsesión pasión por dormir con seis almohadas. Es una maña que adquirí cuando empecé a ocupar una cama de dos plazas. Quizá lo hice al darme cuenta que tenía demasiado espacio para mí; quizá quería aprovechar de hacer lo que quisiera con mi cama mientras la ocupara sola, o tal vez era justo lo contrario: que no me quería sentir tan sola.

Pero el caso es que sí, duermo con seis almohadas, no con cinco, ni con siete, sino con seis suavecitas y deliciosas almohadas. Parece ser el número perfecto: dos en la cabeza, una para abrazarla, una entre las piernas, una en la espalda y una tapándome la cara. Me dan la comodidad que necesito para pasar la noche plácidamente y dormir como una guagua.

Parece absurdo que prefiera 6 almohadas a tener el mejor hombre en mi cama, pero es así. Lo que pasa es que las almohadas tienen ciertos beneficios que otras compañías no tienen:

  • Las puedo desechar y cambiar cuando me canse de ellas.
  • Las puedo manipular y poner en la forma que quiera.
  • Las puedo lavar si tienen un aspecto que no me gusta.
  • Las puedo abrazar cuando lo necesite.
  • Pueden estar calientes o frías, dependiendo si es verano o invierno.
  • Y lo mejor de todo, no hablan, sólo escuchan.

Antes, esto para mí resultaba insignificante, pero ahora es tan importante que suelo llevar mis almohadas cuando voy a dormir fuera. Pero es que, ¿me imaginan a mí, la de las seis almohadas, conciliando el sueño con una sola? No, ¿verdad? Yo tampoco. Y créanme que lo he intentado, pero cuando no las tengo termino haciendo algo parecido a una almohada con sábanas, cobijas e incluso toallas.

Y ¿saben qué es lo peor de todo? que amanezco con una sola, una diminuta almohada queda en mi cabeza y las demás, en el piso. ¿Será que realmente las necesito para dormir? ¿O será que es una simple manía para sentirme acompañada y cómoda?

De cualquier manera…Ojalá que la persona con quien comparta cama en un futuro tenga la misma maña que yo y así tener más almohadas para elegir y disfrutar.

Porfa, ¡dime que tú también eres una loca de las seis almohadas!