Hace poco, un estudio avaló con experimentos el famoso dicho: "la suerte de la fea, la bonita la desea". No es que yo sea un 'monstruito', pero no me considero una belleza. He tenido suerte, pero a veces me pongo a pensar: ¿qué habría pasado si fuera una “niña bonita”?
Es verdad que las crespas queremos ser lisas, las flacas un poco menos planas y las gordas ansiamos ser delgadas. Sin embargo, pocas veces he oído decir que se quiere ser más fea para tener mayor suerte. ¡Y no es que la cara tenga algo que ver!, sino los prejuicios que la gente tiene respecto a las chicas lindas. Si ya era popular el dicho de que "las rubias son tontas", también está el que hace alusión a que las bonitas consiguen todo por su cuerpo y cara, mas no por inteligencia o habilidades laborales.
Pensando en eso y echando a volar mi poco normal imaginación, me visualicé en el pasado y creo que sí, hubieran cambiado algunas cosas. De partida, debo confesar que yo sería de esas que usan todo “recurso visual” para obtener lo que quieren, lo que incluye: escote, cruce de piernas —de película—, cabello al viento y esas típicas agachadas subliminales. Si, quizás sería un poco malula y abusaría de mis “dones” para ir gratis al cine, entrar a sectores VIP y conseguir buenas promociones en cuanto a ropa o cosméticos. Reconozco que me hubiese hecho la indefensa en muchas ocasiones para salir del paso. Ahora, si lo veo por el lado de la suerte, he tenido buenas posibilidades, y estoy segura de que no son por mi apariencia, sino por mi personalidad. En cuanto al amor, diría que se cumple eso de que a las feas –o bueno, a las no tan regias— nos va bien. Estoy casada con un hombre guapo —a mis ojos— y antes pasaba de conquista en conquista, ¿Crees que influya la belleza física en eso o será sólo cosa de autoestima?
Sé que a muchas nos costará asumir que no somos unas "Miss Mundo", pero siendo sincera ¿atribuirías tus logros a tu hermoso rostro? Decir que todo es por el físico o la suerte resta mérito a nuestras habilidades, por lo que - lejos de lo que el estudio pueda decir -, la respuesta siempre estará en nosotras y la forma en que nos paremos frente a la vida.
Me encantaría saber que no soy tan perversa en pensar que ser linda es estrategia de auto-márketing. Suena algo resentido al leerlo así, pero mi cara no tan bella me ha traído felices logros en mis 30 años de vida (aunque estoy segura de que mi rostro en otro cuerpo hubiese obtenido cosas ¡incontables!)
Que preferirías tú ¿la suerte de la fea o los beneficios de la bonita?
Imagen CC: BemDevassa