Spike Jonze es seco, de eso no hay duda. Es uno de mis directores favoritos desde que vi Being John Malkovich y Adaptation (mención aparte merece la increíble dupla con Charlie Kaufman). Su última creación encabeza mi lista de espera de las películas que muero por ver: Where the wild things are.
La película se basa en el cuento infantil del mismo nombre, escrito por Maurice Sendak en 1963 (en Chile no es muy conocido, pero en Estados Unidos es un clásico). Se trata de la historia de Max, un niño de 12 años, un poco hiperactivo y dueño de una imaginación única. Siempre hace pataletas y pelea con su hermana, pero su mamá (Catherine Keener) nunca lo reta. Un día, después de hacerle un escándalo frente a su novio, se escapa de su casa y es ahí cuando despliega toda su inocente fantasía. Max comienza a imaginarse un mundo de amigables monstruos, que parecen juguetes de peluche, en el que vive asombrosas aventuras y del cual él se transforma en rey.
Según el director, esta no es una película para niños, sino sobre niños, en la que explora y analiza su mundo interior a través de Max. "Se trataba de ser respetuosos con los niños, pero sin llegar a ser condescendientes", dijo en una entrevista.
La película se estrenó el miércoles 15 en Estados Unidos, pero aún no hay fecha para Chile. Yo al menos, con sólo ver el tráiler me convencí de que me va a encantar y espero ansiosa que llegue al cine.
Además la banda sonora está increíble, tiene una onda muy indie (como que ahora todos quieren serlo), pero encuentro que va perfecto con la película, liderada por la bacán Karen O (vocalista de los Yeah Yeah Yeahs), quien reclutó a un grupo de músicos y compusieron bajo el nombre de Karen O And The Kids, entre ellos están: Dean Fertita (Queens Of The Stone Age y The Dead Weather), Jack Lawrence (The Racounters y The Dead Weather) y Aaron Hemphill (Liars).