Amo a Leonardo Dicaprio desde "Romeo + Juliet". En ésa época yo era bien chica, pero aún así sus hermosísimos ojos azules y sus perfectas facciones me llamaron la atención. Pero no fue hasta un año después, cuando interpretó a Jack Dawson en” Titanic”, que rompió absolutamente todos los corazones de las adolescentes. Ahí se desató la "Leo-manía".
Me acuerdo que en el colegio, todas competíamos por tener el poster más grande del galán, o las fotos más exclusivas. Generalmente cuando tus papás viajaban, te traían revistas desde el extranjero. Con esas, seguro dejabas a todas con la boca abierta.
Yo me compraba unas revistas españolas – las míticas “Bravo”- topísimas para la época, traían posters de todos los galanes y los grupos musicales de moda, además de stickers y tatuajes – de esos que te pegabas con agua. Verdaderamente un hit. La cosa es que yo me puse uno de esos tatoos en el tobillo. Decía "I love Leo" y lo exbihía feliz, mientras me duró. Aunque debo admitir que lo cuidé como hueso santo.
Ahora Leonardo Dicaprio – a sus 35 años- más que un mino, es un actorazo. Con los años ha ido ganando sus kilitos y perdiendo su baby face, uno de sus mayores atractivos. Pero, el tiempo le ha servido para perfeccionar su actuación. Es uno de los más talentosos de su generación. De hecho mi favorito.
Película que hace, se convierte en todo un éxito. Entre mis favoritas están: "Romeo + Juliet" (1996); "Titanic" (1997); "The Beach" (2000); "Catch me if you can" (2002); "The Aviator" (2004); "Blood Diamond" (2006); y la mejor de todos los tiempos “The Departed” (2006).
Y tú, ¿experimentaste la Leo-manía, o todavía formas parte de ella? Yo sí.