Hace unos días estuve de cumpleaños y me encantó mi celebración. Suena terriblemente egocéntrico y autorreferente, pero es demasiado entretenido ser la protagonista absoluta una vez al año y no lo nieguen, a casi todos les gusta. Existe una licencia especial para ser más tú que nunca y en definitiva hacer lo que quieras, total, es TU día.
Lo único que me carga de sobremanera es que me canten el "cumpleaños feliz" y más si es en reiteradas ocaciones. Es inevitable que aflore esa cara entre vergüenza y agradecimiento fingido, cuando lo único que quieres es que termine rápido (¿quién sabe qué cara es la que hay que poner mientras dura esa maldita canción?). Sin embargo, hay muchísimas cosas que adoro de estar de cumpleaños. Acá les cuento cuáles son las que más, más, más me gustan… ¿Y ustedes qué es lo que más aman de esa fecha?
1 Qué tus amigos te den en el gusto en todo, te pregunten qué quieres comer, qué quieres hacer, qué música quieres escuchar, qué copetes te gustan más y obvio, te inviten.
2 Las sorpresas. Desde chica son mis preferidas, esas cosas que no esperas son las mejores, lo que sea, un abrazo, una visita, un detalle, un saludo, etc. Una vez mis papás me hicieron una fiesta sorpresa y todos mis amigos estaban esperándome en la casa, fue lo máximo.
3 Abrir regalos es lo más emocionante, incluso más que el regalo en sí. El momento de ansiedad que se produce segundos antes de abrirlo, mientras rompes el papel y te imaginas mil posibilidades.
4 El llamado de ese “alguien” con el que morías por hablar, esperas todo el día y derrepente la pantalla de tu celular dice el nombre que automáticamente hará que tu día se ponga mejor aún.
5 Juntar a los distintos grupos de amigos. Es bacán que todos tus amigos se conozcan y lo pasen bien juntos. Unos pocos de la infancia, otros de la U, de la pega, en fin. Porque finalmente cada uno de ellos te acompaña en las distintas facetas de tu vida y de una u otra forma entre ellos también hay algún tipo de conexión.
6 El picoteo de cumpleaños. En las fiestas se comen puras cositas ricas, todo lo que más te gusta, salsitas, sanguchitos ricos, mariscos, sushi, lo que se te ocurra es demasiado rico.
7 Qué tu teléfono no pare de sonar, de pura gente que te llama con las mejores intenciones para puro entregarte buena onda, decirte que te quieren mucho y recordarte lo importarte que eres para ellos. Incluso aquellos que pensaste que se habían olvidado o que no hablabas hace tiempo.
8 Que mi Facebook y mi Twitter estén llenos de saludos de gente diciéndome que este año será increíble, porque les creo, cualquier nuevo año que empiece así de bacán se vislumbra bueno.
9 Soplar las velitas y pedir tres deseos con la firme y secreta esperanza de que uno de ellos sí se cumplirá.
Foto vía J0an!