Sientes un revoltijo en el estómago cuando sabes que debes manejar, inventas miles de excusas para no conducir, prefieres andar en segunda o tercera para estar bien aseguradita, vas por tu pista y no te mueves de ella, te pones nerviosa y sudas. ¿Conoces esos síntomas?
Según un estudio realizado por el Instituto español Mafre de Seguridad Vial, por lo menos un 64% de las mujeres y un 36% de los hombres padecen de este síndrome llamado Amaxofobia, que consiste en la ansiedad y el estrés de manejar un automóvil.
Invade un sentimiento de inferioridad, mareos, vértigos y sensación de desmayo. Este miedo, que según expertos se presenta en un 33% de la población, hace que todo lo que está alrededor es amenazante: los demás conductores, los túneles, las pendientes muy pronunciadas, la carretera y los tacos.
Ahora, porqué las mujeres padecemos más de este síndrome. Según este estudio, es porque los hombres esconden esta fobia en silencio, ya sea por un acto de virilidad, o para no sentir vergüenza, esto sumado a un alto porcentaje de casos de padres y parejas que debilitan la autoestima de mujeres al exponerlas a las primeras experiencias de conducción con un alto grado de estrés.
En mi opinión, yo detesto conducir. No le tengo miedo y no sudo al volante. Pero me carga cómo manejan los capitalinos, hombres y mujeres por igual. Sin mencionar, por supuesto, a los odiados taxistas.
Y tú, ¿padeces de amaxofobia?
Vía: tu voz en tu vida