El año pasado, Bored To Death se convirtió, indiscutiblemente en una de mis series favoritas y en la gran apuesta de HBO. Es que tener a Jason Schwartzman, Zach Galifianakis y Ted Danson juntos en escena es como estar en clases de cómo hacer reír actuando natural.
La primera temporada tuvo sólo nueve precisos capítulos. Tiempo suficiente para percibir el condado de Brooklyn a través de los ojos de Jonathan Ames (el verdadero), de manera tan literaria, una combinación perfecta entre el estilo del cine noir y una revista de comics; y ver el desarrollo de estos existencialistas personajes. Ser testigos de cómo Jonathan (Schwartzman) convertía en su hobby favorito su nuevo oficio de detective privado y material para su nueva novela (libro que obviamente me compraría); Ray (Galifianakis) trabajaba en la superación de sus inseguridades, mientras intentaba ganarse la vida como dibujante y George (Danson) asumía que ya no era tan joven y que había sido un mal padre.
Para quienes se la perdieron, la historia es ésta: Jonathan Ames es un novelista que pasa por una etapa de poca inspiración, que prefiere fumarse un pito y tomar vino blanco, a escribir. Por lo que decide convertirse en detective privado por las noches, argmentando que ha leído tantas novelas de este tipo que sabe perfectamente qué hacer. Finalmente, termina envuelto junto a sus amigos en surrealistas situaciones, de las que salen librados de las maneras más patéticas.
El estreno está programado para el 26 de septiembre en Estados Unidos y me tinca que va a ser igual de buena que la anterior. Acá les dejo el trailer.