Sufrir por la pérdida de un ser querido es algo terrible, incluso cuando ese amado es una mascota. A veces, ahí se hace más compleja la cosa, porque nadie logra comprender el sentimiento. “Si es un perro nomás. Qué le poní color”.
Y como me importa un bledo lo que la gente piense con respecto a mi amor por los animales, les cuento que muchas veces es un problema no tener donde enterrarlos. He visto personas que los meten en bolsas y los tiran al camión de la basura.
Para evitar este tipo de crueldades, sólo dos empresas en Chile cuentan con sus propios camposantos. “Cementerio de mascotas Parque de Asís” del Buin Zoo y “Cementerio y crematorio de mascotas del Pilar” en Panamericana Norte.
Una solución digna y respetable para aquellos que en vida tanto amor y alegrías nos entregaron. Las mascotas son colocadas en una bolsa de arpillera y luego enterradas. Encima se instala una lápida de acrílico con el nombre.
Lo importante, es que ninguno de nuestros animalitos termine en un basurero como cualquier perrito abandonado que nadie quiso. Y si es mucha complicación darle un entierro digno, siempre está la opción de cremarlos. "Ánforas-Chile", "INERS Crematorio de mascotas" y "Del Pilar" se encargan de esta labor.
Así que a querer y cuidar nuestros compañeros. Seamos conscientes y responsable con ellos, incluso hasta el día de su muerte.