Por Carlos Krumel
Que la mirada lo dice todo es tan cierto como que todos los días sale el sol. El problema es cómo la interpretamos y no hablamos de los microgestos, sobreexplotados por la serie "Lie to me". Pero ya que estamos en época de amores fugaces, primaverales y con miras a ser veraniegos, es bueno tener en cuenta que “los ojos hacen algo más que ver”, como dijo Isaac Asimov.
Independiente del entorno, el maquillaje, la ropa y los tragos, si la persona que tienes al frente mira hacia abajo, da por hecho que te dirá algo muy serio, probablemente palabras que sólo tú debes escuchar.
Ahora bien, si los ojos van hacia arriba, cuidado que se está preparando un contraataque argumentativo a lo que hayas propuesto. En todo caso, eso es mucho mejor a que tu interlocutor mire hacia el lado. Ello indica que acaba de esquivar lo que dijiste y que no te responderá francamente o, en el mejor de los casos, cambiará de tema.