Una de mis adicciones favoritas cuando me voy de viaje es ir pegada a la ventana mirando carteles, pero no cualquier cartel, sino esos bien bizarros que una no sabe si son en serio o en broma. En más de una ocasión incluso quise devolverme a sacarle una foto para después poder compartirla con mis amigos y reírme tanto como la primera vez que lo vi. Como esa vez que me crucé con el bar “viagra” o el cartel de “el perro no muerde, el dueño sí”.
Pero esta costumbre de hecho no es sólo mía sino que se ha vuelto una práctica bastante popular en los últimos años en Argentina donde el hobbie de Machi, Gastón y Esteban derivó en "Proyecto Cartele" que primero fue un libro, luego una web y actualmente es un separador en la programación de un canal de cable.
Con cuatro libros editados, decenas de exposiciones y conferencias en todo el mundo, entre las que se destacan las de la Bienal de Arte de La Habana, el Plaza Hotel de New York o la Mar de Música en Cartegena, España,"Proyecto Cartele" cuenta con miles de fotos de carteles de todo el mundo.
El proyecto, que sigue creciendo día a día, busca la participación de todos los caza adictos de carteles que con sólo registrarse pueden subir sus archivos para que sean disfrutados, coleccionados y compartidos entre los usuarios o bien votar, comentar y recomendar carteles, que los hay de todo tipo, desde los más tiernos, insólitos y subidos de tono.