Hace un tiempo atrás me topé con la imagen de arriba, tan trágica como hermosa de Li, una universitaria china de la localidad de Jilin que intentó suicidarse lanzándose por la ventana de un séptimo piso después de enterarse de que su novio la dejaba por otra.
No me tachen de superficial, pero la foto no sólo es conmovedora sino estéticamente hermosa. Desde el día que la vi que no me la puedo sacar de la cabeza… eso sólo hasta que encontré otra imagen que ilustra una tragedia desencadenada por el despecho y el desamor…
En este caso, la protagonista es Evelyn McHale, una norteamerica de 23 años que el 12 de Mayo de 1947 se lanzó al vacío desde el mirador situado en la planta 86 del Empire State Building después de ser abandonada por su novio. Evelyn cayó sobre el techo de una limusina dejando una nota que decía: “Él está mucho mejor sin mí… yo no sería una buena esposa para nadie”.
Estéticamente las dos imágenes son hermosas, pero sus historias demasiado tristes y que por supuesto nadie debería copiar. El desamor no merece llevarse, además de todo, nuestra propia vida.