Foto: She Knows
Les apuesto que más de alguna de ustedes tiene ropa guardada en el clóset que ni siquiera la usan, pero la tienen ahí pensando que alguna vez les podría servir, quizás para alguna ocasión especial. Lo peor de todo es que en la mayoría de los casos, son prendas que llevan ahí años sin que las usemos y lo único que hacen es estorbar y quitarnos espacio.
Muchas veces, lo mejor es deshacerse de ellas y renovarlas por otras nuevas. Pero hay casos en que aquella ropa que teníamos en el olvido, resulta que ahora nos queda mejor que antes. Eso sí que es bueno, sobre todo si es una chaqueta o un pantalón que antes no nos cerraba y ahora nos queda perfecto. Precisamente me acordé de esto con un capítulo de “Sex and the City” (donde Berger, el novio de Carrie, termina con ella en un Post-it) cuando Miranda logra ponerse sus jeans ajustados luego de años que los tuvo en el clóset. Se sentía totalmente regia porque por fin le entraban luego que bajó de peso por su embarazo. En ese caso, sí sirve guardar algunas prendas.
Según yo, a pesar que sé que hay cosas que tal vez nunca me voy a poner, a veces es bueno guardar esa polera que antes no te quedaba bien, porque más tarde puede que bajes de peso y te quede mejor. Y díganme si no hay nada mejor que eso!!!
Pero todo esto también tiene una excepción: Por favor no guarden ropa de muchos años atrás, porque en algunos casos pasa de moda y cuando se la quieran poner, por mucho que les quede espectacular, ya no se ve chic. Lo mejor es conservar prendas clásicas y que las puedas usar independiente de las últimas tendencias.