Veo tele. Veo harta tele y hartas series. Pero como siempre en este período del año, enviudé. Llegó ese “tiempo muerto” en el que espero impaciente los estrenos de las nuevas temporadas de mis favoritas (entre ellas, Homeland y The Newsroom).
Para qué hablar de Downton Abbey, Girls o How I Met Your Mother. El 2014 recién podré saber cómo Lady Mary rehace su vida sin Matthew; si la crisis de Hannah ya pasó y dejará de ser tan mala onda con Adam; o cómo será el encuentro entre Ted y la chica del paragua amarillo.
En fin. Entre cierres de temporada y mi vacío televisivo, descubrí The Following y me obsesioné. Si bien es cierto que la historia del psicópata brillante y carismático versus el policía héroe y trancado es una fórmula súper repetida en el cine, es un poco más nueva para la televisión. Sin embargo, cuenta con ese factor sorpresa que te atrapa justo cuando pensabas que ibas a tirar la toalla.
La primera y única temporada cuenta con 15 episodios y les debo confesar que la vi entera como en 3 días. Es que Ryan Hardy es lo mejor. ¿Les dije que el protagonista es Kevin Bacon? Bueno, él es Ryan Hardy, un ex agente del FBI, alcohólico, lleno de traumas y -según él- maldito, porque toda la gente que lo rodea se muere. Ese es su karma y lo que lo ha transformado en un tipo solitario, incapaz de dejarse querer y de tener relaciones estables.
La cosa es que Ryan debe volver a su antigua pega para ayudar a capturar a Joe Carroll, un asesino en serie, doctor en literatura y fanático extremo de Edgar Allan Poe, que se escapó de la cárcel y con el que Ryan estuvo involucrado tras ser su último caso antes de abandonar la institución. Por lo tanto, Ryan es vital. Es el único que lo conoce a la perfección y él único capaz de volverlo a capturar.
La serie es buena. No es la mejor de la vida, pero es buena. Te mantiene atenta cada minuto en cada capítulo y cuando termina uno, quieres ver el siguiente altiro. No obstante, hay algo que nunca me terminó de cuadrar y es la finalidad de este asesino/escritor. Lo que persigue Joe Carroll es hacerle pagar a Ryan el haberse enamorado de su esposa y que su esposa se haya enamorado de él. Entonces, no encuentra nada más poético que crear una secta convenciendo a sus seguidores de la idea de la validación de la vida a través de la muerte, o alguna shit como esa, basándose en la obra del escritor. Básicamente, matan con una excusa un poco pobre. Por otra parte, a pesar de que los personajes, en teoría, suenan complejos y atractivos, la historia no profundiza lo suficiente en ellos. Excepto por algunos flashbacks que nos revelan aspectos del pasado de los protagonistas y nos permiten entenderlos un poquito más. Sin embargo, quiero pensar que la serie funciona como la vida. A veces estamos tan profundamente inmersos en “lo que estamos haciendo” (como Ryan y su equipo en la “misión del día”) que quizás necesitaba de más capítulos y más tiempo, para que la temporada alcanzara a cubrir todos lo que esperábamos (o no esperábamos) que pasara. No les voy a contar más, porque me cargaría que ustedes me “espoilearan” a mí. Por eso, solo me queda recomendárselas para que la comentemos después. Créanme que con el primer episodio es suficiente para entender todo lo que pasará después. Acá les dejo el trailer por si les tinca.
*Dato: Pueden ver la serie online y con subtítulos en mirathefollowing.com. Enjoy!