Soy una fanática declarada de las teleseries chilenas. Cuando alguna me cautiva, me involucro al cien por ciento con los personajes. Las he seguido desde que tengo memoria y recuerdo algunas ¡sensacionales! Hay muchas que merecen una distinción, porque ¡me las viví con todo y me hicieron soñar! Pero las siguientes - al menos para mí - son simplemente inolvidables:
1. Sucupira: Contaba la historia de un ficticio balneario que se caracterizaba por la longevidad de sus habitantes, quienes ¡no morían!. El corrupto alcalde Federico Valdivieso (Tito Noguera), obsesionado con inaugurar el cementerio de la comuna a cualquier costo, era el claro antagonista, pero quien a la vez aportaba importantes dosis de comedia. La trama se completaba con la llegada de vanguardistas universitarias (tesistas de Biología Marina), quienes revolucionaban a los hombres del conservador poblado. Con un genial guión brasileño, Sucupira encabeza mi lista de inolvidables (1996)
2. Amores de Mercado: Versión moderna y chilena de “El príncipe y el mendigo”, narraba la historia de dos gemelos separados al nacer (interpretados magistralmente por Álvaro Rudolphy), quienes se criaron en clases socioeconómicas muy distintas y desarrollaron personalidades diferentes. El azar llevó a que sus vidas se mezclaran en la adultez, lo que dio inicio a jocosas y entretenidas situaciones. Imborrable el recuerdo de Pelluco, el hermano más extrovertido, que llevaba el peso de una trama ¡genial! (2001)
3. Ámame: Esta antiquísima serie fue la primera en que los protagonistas ¡eran adolescentes!, lo cual sin duda contribuyó a su gran éxito (es un público jamás se había visto representado antes en el formato, salvo personajes secundarios y muy accesorios). El cántico: “Vamos todos a la casa del Jota, qué buena onda” es un clásico que todos los treintañeros (cof, cof) recordamos.
4. Tic Tac: Una novedosa puesta en escena estilo cómic, una romántica historia de amor y la banda sonora del tributo latinoamericano a Queen son factores que la convirtieron en un producto "de culto"
5. Los treinta: Exitosa teleserie de TVN que buscó abordar los conflictos del segmento "adulto joven". Ok, no lo logró a cabalidad (ojalá todos a esta edad tuviéramos mansiones, emprendimientos exitosos y mucho dinero), pero al menos fue entretenida.
6. Soltera otra vez: Un poco más cercana al público que cuenta entre 20 y 30 años y es de clase media. Muchas mujeres se vieron representadas por la atolondrada Cristina (Paz Bascuñán) y sus dramas tanto laborales como amorosos. Todas sufrimos sus desencuentros con Monito y deliramos cuando enganchó con el vecino. Y si bien su secuela no tuvo el mismo éxito, la primera parte fue sencillamente ¡memorable!
Y a ti, ¿qué teleserie te marcó la vida?