Vampiros emocionales: ¡Aléjate de ellos!

No tienen colmillos filudos; tampoco se les ahuyenta con ajo, ni succionan tu sangre, pero sí te drenan anímicamente. Todos conocemos al menos a un vampiro emocional… ¿Hay alguien a quien tratas de evitar a toda costa? ¿No quieres devolverle la llamada? ¿Te cansa la idea de juntarte con él/ella? ¡Ahí tienes uno!

Existen 2 tipos de vampiros emocionales: el primero es el “invisible”. Es un poco difícil de reconocer, pero algo que lo caracteriza es que detrás de cada elogio, hay una crítica implícita. Te puede decir “Estás increíble con ese vestido”, pero la frase termina con un “¡Incluso pareces más delgada!”. ¿Ven? Un poquito de veneno oculto tras el cumplido.

El vampiro solapado clasifica entre los “vampiros invisibles”, y se caracteriza por usar el humor para “atacarte”. Puede festinar de que estás con sobrepeso y, si les pides que no te haga ese tipo de bromas, saldrá con que eres una acomplejada. Siempre trata de quedar bien y se hace la víctima. Te puede decir una cosa, pero tú siempre percibirás otra. Esta confusión terminará drenando tu buena onda.

Ahora, vamos con los “vampiros visibles”: son mucho más fáciles de detectar, pero igual de difíciles de sobrellevar. Existen 7 tipos de estos chupasangre (o más bien, chupaenergías):

1. “Los negativos”: Siempre ven el vaso medio vacío. Tú serás la encargada de subirles el ánimo y buscar solución a sus problemas, porque ellos ven todo negro. El punto es que llegará un momento en que tú terminarás más deprimida.

2. “Los quejosos”: Reclaman sin parar sobre algo que les molesta muchísimo, pero no hacen nada para cambiarlo. ¿Quién escucha todas sus quejas? Tú, y terminarás drenada anímicamente.

3. “Los criticones”: Nunca te dan la razón y siempre objetan lo que dices o haces. Le encuentran un defecto a todo, son muy irritantes y terminarán agotándote por completo.

4. “Los belicosos”: Un mínimo error los hará enojar, reaccionando en forma agresiva. Deberás tener extremo cuidado con lo que dices y haces. No te deja ser.

5. “Los débiles e indefensos”: Incapaces de defenderse por sí solos; siempre requerirán tu ayuda, apoyo y protección. No saben valerse por sí mismos. El tener que resolver constantemente sus problemas acabará con toda tu energía.

6. “Los sarcásticos”: Su humor negro acabará con tu autoestima. Sus ironías y comentarios tóxicos atacan tu alma, haciéndote sentir dolida e insultada.

7. “Los catastróficos”: Ven peligro en todos lados. Siempre están hablando de enfermedades, catástrofes, amenazas terribles, etc. La vida para ellos es un peligro inminente. ¡Este tipo de vampiro acabará con tus nervios!

Ahora que ya los conoces, aprende a identificarlos. Si te llegas a topar con alguno de estos vampiros, siempre debes mantener tu equilibrio interior. Ya sabes que él/ella es un vampiro emocional, por lo tanto, intuyes cómo actuará. No dejes que te afecte; si la persona no es esencial en tu vida, aléjate de una relación tóxica.

¿Cómo liberarnos de toda la energía negativa acumulada? Haciendo deporte, saliendo a caminar, cantando, bailando y manteniendo contacto con la naturaleza. Y sobretodo, ¡al rodearnos de gente optimista y buena onda!

Y tú, ¿conoces algún vampiro emocional?

Foto CC vía Flickr