Hay tres "pecados capitales" que practico cotidianamente y con dos de ellos siento cero culpa, porque no le hacen mal a nadie y me dan mucha alegría. El tercero, sin embargo, me juega malas pasadas y me encantaría tenerlo ahí, bien "domado", pero nada que hacer: la bestia iracunda despierta sin aviso ante episodios de estrés, injusticia y sí, también por simple maña, no lo niego.
Asumo que soy muy polvorita ante ciertas cosas y situaciones puntuales. Acá va una mini lista de algunas que me sacan de mis casillas y ante las que jamás puedo mantenerme indiferente.
1.- Temas valóricos/polémicos en la sobremesa familiar: Sé que el momento de comer merece respeto y que es muy penca terminar un almuerzo con un nudo en el estómago, pero pucha, a veces colapsaba viendo qué tan distinto pensábamos mi familia y yo. Cuando esto pasaba - hace 10 años - mis hermanas me decían Katie Kaboom.
2.- Comentarios ignorantes, inmaduros o que son escritos para ser ají en el ojo: No es necesaria más explicación que el profundo desagrado de leer a gente ignorante o insensible opinar con tanta liviandad sobre temas importantes. Y no lo digo de "grave", pero estos buenos espacios de participación a veces se transforman en una carnicería, sacan lo peor de cada ser humano y me dejan con la sensación de que el mundo jamás va a cambiar.
3.- La gente "mala leche": Me molesta en lo más profundo la gente que intenta perjudicar al resto por la espalda y con mentiras. Hablo de la típica persona que pone caras simpáticas o en persona se achuncha entero, pero por la espalda te descuera.
4.- Que no se seque la ropa en invierno o se acabe el shampoo: Estas son estupideces, pero cuando estoy contra el tiempo, me dan rabia y ganas de llorar.
Creo que a todos nos enojan ciertas cosas y vivir tragándose todo, hace mal. Es cierto, hay varias alternativas para canalizar la ira, pero ¡no somos robots! y mientras mantengamos el respeto hacia los demás, no es tan terrible mandarse una rabieta o un rosario de aquellos en la intimidad del hogar.
Imagen CC [Guyon Morée]