"Mi amigo y yo; bueno, él ya no es mi amigo"…
Hace poco tiempo mi prima me contó que la relación con uno de sus camaradas se estaba confundiendo y que “ya no lo veía como antes”. Obviamente, le estaba empezando a gustar. Le pregunté si a su “amigo especial” le pasaba lo mismo que a ella y me contestó que sí, pero ella no quería hacer nada porque le daba miedo perderlo para siempre.
Le conté que yo tenía un muy buen amigo en la universidad, pero todo se confundió después de una fiesta. Mientras bailábamos “I love it” de Icona pop, una cosa llevó a la otra y en un momento… ¡estábamos besándonos!
Decidimos quedar como antes y comportarnos “normal” pero eso no funcionó. Así es que escondidos del resto de nuestro grupo, empezamos una relación amorosa en secreto.
Al principio todo era confuso en mi cabeza: pensaba que era malo terminar una amistad tan buena como la que teníamos para ser algo que quizás no iba a “dar frutos”. Pero después de estar con él, me di cuenta de que ambos nos conocemos tal cual como somos y desde hace mucho tiempo. Nos aceptamos con nuestros defectos y virtudes y si nos gustamos así, es porque nuestra relación puede durar mucho. Vinieron los “te quiero” y ya llevamos casi 5 meses.
Así es que les digo: si están en “algo raro” con uno de sus amigos, atrévanse a ver qué hay más allá, porque de eso puede salir algo lindo y duradero.
Y si tienen miedo por perder la amistad les digo: ¡quien no se arriesga, no cruza el río!
Imagen CC: kozumel