Somos seres sociales, y como tales, tenemos la amistad situada entre nuestros afectos primordiales. ¡Y claro, si contar con buenos camaradas es lo más! Sin embargo, no siempre tenemos la suerte de encontrarnos ángeles en el camino: esas compañías fantásticas que apañan en todas y son leales “orejas” en los desahogos. Es más, lejos de ser un bálsamo en nuestra vida, algunas partners terminan por ser ¡un cacho!...
Si has tenido una amiga-problema, seguro la has identificado porque lejos de ser un apoyo, una alegría y un pilar, termina generándote dolores de cabeza y siendo una preocupación adicional en tu día a día. Las hay de muchos tipos, y en Fucsia te describimos algunas. ¡Para que las identifiques!
1. La interesada: Este espécimen sólo aparece cuando tiene algún provecho que sacar de tu persona. Tienes noticias suyas siempre que requiere dinero urgente - porque tiene a varios acreedores tras sus pasos - o bien, cuando requiere que le prestes tu departamento para ¡la cita de su vida! Una vez que logró su cometido, desaparece hasta que le sucede otra “desgracia”. En buenas cuentas, viene, te trae un problema y se va. Nunca suma, sólo resta.
2. La “dark”: Te busca para que oigas su enrevesada teleserie mexicana. Es más, los culebrones turcos se quedan cortos ante sus desventuras. No importa cuántas palabras gastes en consolarla y procurar brindar esperanza a su vida: siempre terminará viendo el lado oscuro e incluso parecerá molestarse cuando intentes infundirle optimismo. “Sin querer queriendo” terminará transmitiéndote su visión críptica de la vida. Consumirá tus energías.
3. La absorbente: Comúnmente es una chica joven, sin trabajo, pareja ni grandes responsabilidades en la vida. Querrá que seas su amiga/pololo/todoterreno, que la acompañe al cine, de compras y celebre San Valentín junto a ella. Una maravilla si estás en la misma parada, pero un cacho cuando no es así y trabajas, estudias (¡qué falta de consideración!) o tienes la osadía de formar familia. Es celosa, controladora y posesiva. No entenderá un no por respuesta, te acusará de fría o mala amiga y te dejará “fuera de onda”. ¡Y pobre que prefieras la compañía de otra chica, porque arderá Troya!
4. La envidiosa / solapada: Basta que le comentes que te matriculaste en determinada “U” para realizar un fantástico postgrado (o iniciar estudios universitarios) para que te diga que es una pérdida de tiempo y plata. Te dirá que la institución que escogiste no es idónea, que el programa que comenzarás a cursar no sirve para nada o que - sencillamente - no te la podrás. Todo “con cariño y buena onda”, porque te quiere mucho y “desea lo mejor para ti”. Si le presentas a un novio, te parecerá que “eres mucho para él”, “no te merece” y debieras buscar una mejor compañía. De más está decir que en el fondo mataría por saborear lo que tienes y no soporta que lo hayas conseguido y ella no. Next para este espécimen.
5. La Party Girl: Vivirá de fiesta en fiesta y de carrete en carrete, pretendiendo que la acompañes, presentándote distintos “minos” y llevándote por el camino de los placeres / juergas eternas. Si no aceptas una salida porque estás cansada o tienes compromisos académicos / laborales al siguiente día, te transformarás automáticamente en “la fome” y “la perna”. Ojo con sus divertimentos “hardcore”, que pueden provocarte serios aprietos. ¡Mucho cuidado con esta chica, pues no se toma nada en serio! (ni siquiera su propia seguridad)
6. La Meneater: Alucina con ser la más bella y deseable de la cofradía. Está acostumbrada a tener al hombre que desee; por lo mismo, si pone los ojos en tu novio, no pienses que el cariño que por ti siente la detendrá. Serás testigo de coqueteos bastante sutiles (e incómodos) hacia tu pareja. Si la encaras, se molestará y aducirá que “te estás pasando películas”. Podrás imaginar que esta historia no tendrá un feliz final y te obligará a escoger entre tu pareja y ella.
Y tú, ¿a cuántas de estas amigas “cacho” has tenido?
Imagen CC Lionel Fernández Roca