Cuando recién conocemos a alguien, intentamos mostrar nuestros mejores atributos. Con el paso del tiempo, el vínculo se hace más fuerte y comenzamos a dejar ver nuestras pequeñas “mañas”. El problema es que, en algunos casos, estas “mañas” son en verdad rasgos de personalidad que nos entrampan en vínculos tóxicos. Uno de estos es el que se puede dar con un hombre manipulador. Presta atención a los siguientes tips para poder identificarlo y correr por tu vida:
1. No es mi culpa, es tuya: Un hombre manipulador no asume la responsabilidad de sus actos y se desentiende de ella. De hecho, culpa a los demás hasta del mal tiempo. Si tienes una relación con un hombre así, tú serás la culpable de todo. Siempre, sin excepción. No importan los argumentos, no importa si lo viste con tus propios ojos o incluso si tienes fotos… este hombre hallará la forma de dar vueltas las cosas a su favor. Él siempre gana, y tú siempre pierdes.
2. Va donde calienta el sol: Un hombre manipulador no es claro en cuanto a sus sentimientos y opiniones. Muchas veces te parecerá que es algo ambiguo y confuso en sus respuestas. Y no sólo eso, este hombre cambiará su opinión y comportamiento según las distintas personas y/o situaciones en las que se encuentre. Una cosa es querer caerle bien a los suegros y otra, muy distinta, es sentir que no conoces a tu pareja en absoluto.
3. Eterna víctima: Un hombre manipulador busca la compasión a través de la victimización constante. Siempre sufrirá de alguna enfermedad nueva, siempre tendrá mucho trabajo que hacer o su jefe le hará la vida imposible. El caso es que necesitará tu apoyo todo el día, todos los días. Su vida es un drama sin fin. Conversar con él te agota porque no para de lloriquear y quejarse.
4. Mentiroso, mentiroso: Uf, este hombre miente hasta por los codos. Tiene un magíster en el asunto. Maquilla y retuerce los hechos para quedar “siempre bien”. No intentes encararlo, porque logrará dar las vueltas las cosas y, de alguna manera, terminarás pidiéndole perdón. Ahora, aunque él mienta más de lo que respira, te exigirá que tú seas totalmente honesta con él. Los manipuladores son muy persuasivos, y terminarás pensando que seguramente escuchaste mal.
5. 10 mensajes nuevos en WhatsApp: Un manipulador no te dirá las cosas cara a cara, sino que logrará que otros hablen contigo o te hará saber lo que piensa de manera indirecta. Te llamará por teléfono, te dejará una nota sobre la mesa o te mandará mensajes por WhatsApp. Logrará que te sientas la peor persona del mundo y, si tenías planes para la noche, conseguirá que te quedes con él. Pero ojo, no tendrán una velada romántica, sino que se encargará que lamentes haber pensado en dejarlo solo. Es cizañero, genera sospechas y enemistad donde antes sólo había amor.
6. Si te duele la cabeza, él tiene taquicardia (y no se queja): Si estás con un hombre manipulador, pronto te darás cuenta que no tienes derecho a enfermarte o sentir cansancio, porque él se siente peor que tú y no reclama. Pero eso es una gran mentira, porque la verdad es que se la pasa lanzando quejas todo el día. Este hombre es sumamente egocéntrico, y todas las conversaciones que tengan girarán en torno a él. Prepárate para escuchar la misma historia, una y otra vez.
7. Cuidado con los favores: Cuando recién conozcas a este hombre, se mostrará muy atento contigo. Te bañará en halagos, en pequeños o grandes detalles y no durará en apoyarte si requieres su ayuda. El problema que tiene aceptar favores de él, es que los va anotando todos en su libreta mental. ¡Todos! Prepárate, porque no pasará mucho tiempo antes de que empiece a cobrarte toda la atención que le debes. Mucho mejor si se los devuelves en forma de un auto nuevo.
8. Príncipe encantador: Tal como en la película Shrek, este hombre será un príncipe encantador. Es tan lindo, pero a la vez tan vulnerable. Sientes unas ganas irresistibles de correr a sus brazos y consolar su corazón roto. Pero más pronto que tarde, te das cuenta de que era un tirano. Este príncipe (que de príncipe no tiene nada) usará el miedo, la obligación y la culpa para hacerte ceder. Es un titiritero que te ve como un objeto que debe complacerlo. Y, si no lo haces, sufrirás.
¿Conoces a un hombre manipulador? ¡Ojo con él!