Debo confesarte que soy de esas mujeres que, cuando se queda en casa, ¡no se arregla ni un poquito! No me ducho, no me maquillo y menos me visto con algo lindo. Pesco mis trapos regalones y me relajo como nunca. Pero ¿cuál es el límite entre ser despreocupada por un día y, derechamente, descuidar tu apariencia? Presta atención a estos 5 síntomas que te indican si te has dejado estar:
1. Tus amigas insisten en un fashion emergency. ¿Recuerdas la última vez cambiaste tu corte de pelo? ¿O que, por último, te cortaste las puntas? ¿Cuándo fue la última vez que le diste un toque nuevo a tu look, o que hiciste algo respecto a ese cabello tan opaco? ¡No te dejes estar! Puede ser que ese hombre que tanto amabas haya dejado tu lado, pero eso no significa que te debas hundir en la tristeza y descuidar tu apariencia. Vive para ti, ¡y corre a la peluquería!
2. Tu pareja te ruega que te inscribas en el gimnasio. Cuando estabas soltera, te dedicabas 100% a ti. Comías sano, hacías yoga y devorabas todas tus novelas favoritas. Pero tienes la mala costumbre de que, cada vez que te emparejas, te dejas estar. Reemplazas las verduras por comida chatarra y el ejercicio por tardes enteras mirando la tv. Es como si el “misión cumplida” te hiciera olvidar que una vida saludable es algo que hay que mantener ¡por siempre!
3. Toda tu ropa es dos tallas más grande. Hace años que no renuevas tu clóset ni te compras, aunque sea, un calzón nuevo. Comenzaste a usar tu buzo no sólo los fines de semana, sino que todos los días. ¡Todo el mundo te aconseja que te arregles un poco más! Puede que te enoje la superficialidad, pero la verdad es que detrás de una apariencia tan descuidada muchas veces se esconde una gran pena que nos impide disfrutar la vida. ¡Conversa con alguien sobre lo que sientes!
4. Tu shampoo y jabón comiezan a durar mucho más tiempo. Otro de los síntomas de que has descuidado tu apariencia es que dejas de ducharte. ¿Para qué? ¿Qué sentido tiene ponerse linda? Es una pérdida de tiempo… ¡No! Esa no es la actitud. Son muchas las causas que te pueden llevar hasta este punto: quizás te despidieron o quizás una persona querida partió. Sea cual sea el caso, sigue adelante y pide ayuda si es necesario.
5. Tu mamá insiste en prepararte ensaladas. Finalmente, uno de los síntomas más notorios de que has descuidado tu apariencia es que toda tu ropa comienza a apretarte. De hecho, ¡has subido como cinco kilos en sólo un mes! No escapes de tu dolor con papas fritas y hamburguesas. Una de las causas más comunes tras un look despreocupado es la baja autoestima, que hace que nos descuidemos y que intentemos alejar a los demás, pues creemos que no merecemos su amor. ¡Mentira! Tú mereces todo el amor del mundo, nunca lo olvides.
Y tú, ¿descuidas tu apariencia?