Hay un momento en que la moda pasa a un segundo plano, dando prioridad a estar abrigadas y no mojarnos. Sí, porque cuando llega el invierno, también llegan las lluvias. ¿Qué hacemos? Seguramente todas tenemos en el closet esa parka fea, pero regalona, que nos quita el trabajo realizado en años para mantener un estilo, pero nos salva de la lluvia. No te diré que la botes, pero sí que puedes usarla sin dejar de verte cool o chic.
¿Qué formas tenemos? De todos los tipos. Para empezar está la clásica corta de mangas largas, algunas con gorro (ojalá que no arruine el pelo) y otras sin. Están las clásicas marcas de outdoor que valen caras, pero también los supermercados y multitiendas ofrecen alternativas económicas. Quizás el corte puede ser más informal y tú buscas algo para los días de lluvia; si es así, las parkas largas, hasta la altura de la rodilla, serán tu opción. Estas suelen tener un estilo similar al de los abrigos largos: un poco ajustadas a la cintura, dando una sensación de formalidad que otras parcas pueden no tener.
Pero si la formalidad no es tu mayor prioridad y buscas diversos estilos, la parka sin mangas lo es todo. Es ideal para los looks mucho más casuales o sport. Puedes ponerte un polerón debajo y estarás listas para ir al gym con un outfit cool. Ten en cuenta que todas estas prendas pueden incluir gorros, lo que es ideal para cuando no tienes un paraguas. Algunas veces éstos vienen adornados con pelos, dándole un toque mucho más urbano. Es ideal para un día en la universidad o de paseo con las amigas.
Verse bien no implica tener que pasar frío, las parkas deben ser nuestras aliadas en los días de lluvia. Si te gustan negras, deja que el resto de tu ropa le dé color a tu look. Atrévete a jugar, pero recuerda tener tu parka a mano, porque cuando la lluvia te pille, nadie más te podrá salvar.
Y tú, ¿cómo prefieres usar las parkas?