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  • Pequeñas cosas terribles: La lactonesa

    Si estás dispuesta a romper tu régimen en tu hora de colación, los infaltables locales de comida rápida te resultarán sumamente amigables. Encontrarás alternativas para todos los gustos y bolsillos: hay ensaladas, sandwich con queso cheddar y empanadas varias. De vez en cuando, obvio que te tientas con una oferta ...

  • Pequeñas cosas terribles: la gente condescendiente

    El carácter es algo que vas desarrollando con el tiempo y a medida que tienes más experiencias con la gente, es cuando desarrollas mayormente tu forma de pensar, discriminando lo que te atrae de lo que que no. Gracias a lo anterior te conviertes en una persona capaz de entablar ...

  • Pequeñas cosas terribles: Las antihombres

    Típico: tenemos una pena de amor y absolutamente todos los hombres se vuelven los peores seres humanos del universo. “¡Es que son todos iguales!” nos decimos convencidas, usando un pijama de vieja, con una caja de pañuelitos al lado y un buen helado de compañero. Son esos minutos en los ...

  • Pequeñas cosas terribles: Ser demasiado intensa

    Nunca pensé que querer tanto, cuidar a alguien, anhelar con pasión, ponerle tanta onda y ganas a las cosas podía ser un problema. Y lo es. Sí, definitivamente lo es ser demasiado intensa para querer. Y no hablo sólo de un pololo, si no del amor a los amigos, a ...

  • Pequeñas cosas terribles: un verano sin vacaciones

    Cuando una está en la universidad, hay momentos en que lo único que quiere es estar titulada, buscar trabajo para tener lucas y gastarlas en lo que se pase por la mente (además de ahorrar una parte para planes futuros). Ahora, ya metida en el mundo laboral, de verdad hay ...

  • Pequeñas cosas terribles: Cita a ciegas

    ¿Existe algo más terrible que tus amigas te organicen una cita a ciegas? Hay que admitirlo: conocer gente nueva siempre es y será entretenido. Pero cuando te preparan un encuentro con alguien que no conoces en absoluto, puede ser un poco - bastante - extraño e incómodo. Este tipo de "eventos" hacen ...

  • Pequeñas cosas terribles: Intolerancia a las críticas

    Reconozco ser bastante un poco intolerante a la crítica. Sí, ya sé que todos somos perfectibles; tenemos nuestras “pifias” y mañas, por lo que siempre es válido que alguien nos haga notar cariñosamente nuestras falencias a modo de mejorarlas. Pero a mí me cuesta; aunque trato, créanme que sí. Es ...

  • Pequeñas cosas terribles: ser mujer

    “¿Qué habría escrito Neruda? ¿Qué habría pintado Picasso?”, así esbozaba Ricardo Arjona en su canción, que con el tiempo se convirtió en un himno para la mujer. Parece ser que ellos no pueden vivir sin nosotras y ¡claro!, es verdad. Somos el “mal necesario” para algunos orgullosos y “una bendición ...

  • Pequeñas cosas terribles: conocer a los suegros

    Cuando empezamos una nueva relación, hay miles de “primeros momentos” hiper especiales. De esos que queremos atesorar en nuestra memoria como hitos de la historia que estamos construyendo: el primer beso, la primera cita, la primera vez que nos quedamos a dormir, las primeras vacaciones juntos… en fin, etapas que ...

  • Pequeñas cosas terribles: las suegras entrometidas

    por Paz Bell ¿Cuántas nos hemos puesto nerviosas al momento de conocer a nuestras suegras? Dicen que la primera impresión es la que marca la forma en que ellas te verán "forever and ever". Recuerdo perfectamente cuando conocí a mi suegra: debido a que era época de primavera, ¡tenía una ...

  • Pequeñas cosas terribles: Los

    Con esto de las fiestas de fin de año, seguro aparecieron aquellos clásicos personajes barsas: los amigos, familiares o conocidos “paracaidistas”. Esos, los mismos que nos hacen recordar a Clinton y Reagan, los míticos “Corazones Services”. Las treintañeras aún deben tener fresca en la memoria a la pareja de motociclistas ...

  • Pequeñas cosas terribles: ¡No puedo superar mi desorden!

    Tengo que asumir que tengo un problema. Soy incapaz de mantener el orden, especialmente en mi pieza. Diariamente voy desordenando y siempre salgo apurada; para cuando ya tengo tiempo de ordenar estoy tan cansada que en lo único que pienso es en dormir o ver tele. Cuando me decido a ...

  • Pequeñas cosas terribles: los ronquidos

    Después de un largo día en el que has soñado con tu cama y con dormir eternamente, de repente te encuentras con los ojos pegados en el techo sin poder conciliar el sueño porque la persona con la que estás compartiendo la pieza no hace nada más ni nada menos ...

  • Pequeñas cosas terribles: mi amiga se volvió mística

    Sé que soy una persona media difícil. Además de tener harto carácter, soy bastante llevada a mis ideas, y cuando hay cosas que no logro entender muy bien me complico ene, porque me carga que me saquen de mis esquemas. Por eso adoro a mis amigas, porque además de esforzarse ...