No, no es otra excusa para comer chocolate sin sentir una terrible culpa. Tampoco es una forma de justificar nuestras ganas de comerlo... se trata de un estudio serio que explica que comer chocolate ayudaría a prevenir el riesgo de ataques cardiacos o de apoplejía en casi un 40%.
Una investigación realizada por alemanes a casi 20.000 personas durante ocho años, reveló que quienes consumían un promedio de seis gramos de chocolate por día (un pequeño trocito) registraban un riesgo 39% menor de ataque cardiaco o apoplejía.
Esto se debería a que el chocolate tiene flavonoles, que ensanchan los músculos de los vasos sanguíneos, lo que redunda en una disminución de la presión de la sangre.
Estudios anteriores habían insinuado que el chocolate negro en pequeñas cantidades podía ser beneficioso, pero este es el primer estudio que observa sus efectos durante un período prolongado.