Creo que los fieles amantes de El Señor de los Anillos me van a odiar un poco, pero cuando fui a ver El Hobbit: La desolación de Smaug me quedé pegada con un nuevo personaje inventado por Peter Jackson y que nunca estuvo en los libros de J.R.R Tolkien.
Se trata de Tauriel, una elfo silvano que, al menos a mí, me pareció fascinante en la película. Y la actriz que le da vida al personaje es, nada más ni nada menos, que Evangeline Lilly, sí, nuestra Kate Austen de la serie Lost.
La verdad es que esta actriz canadiense es seca, porque no se quedó pegada bajo el estigma de su primer gran personaje en la serie y en El Hobbit se presenta como una genia. Con su arco y flecha, el elfo transita por la película como si fuera la protagonista, cero miedo, puro estilo y, estupenda, obvio.
Pero la historia de Evangeline no es sólo de pantalla. Nació en Canadá y fue descubierta por una agencia de modelos; lo cierto es que eso no le interesaba mucho, pero con la plata que ganó logró pagarse sus estudios en la Universidad British Columbia donde fundó y dirigió un comité para el desarrollo y los derechos humanos. Incluso se fue de misionera a Filipinas.
De todos modos, cuando se hizo famosa en la serie Lost, no hubo vuelta atrás y las pantallas la amaron. En el 2005 fue escogida como la segunda mujer más sexy del mundo según la revista Maxim (Eva Longoria se llevó el primer puesto), y en el 2013 también se llevó el galardón, pero entregado por la revista Glam’mag.
Inteligente, buena onda, bonita, versátil, talentosa y bajo perfil. Evangeline Lilly las tiene todas.
Fotos CC vía MuyCine.com y LaFabula.