Pequeñas cosas terribles: estar a cargo de un practicante

Estar a cargo de un practicante suena genial: tienes un “esclavo” a tu disposición y está obligado a hacer todo lo que tu quieras, te alivia un poco la carga de pega y es genial. Lo mejor de todo es que te deben hacer caso sí o sí, porque su nota de práctica laboral está en juego. Sin embargo, ésta no fue mi realidad.

Todo comenzó cuando mis jefes decidieron traer a un practicante para que nos ayudara en el área de comunicaciones. Llegó este personaje a la ofi y comenzó la entrevista. Mi jefe era el que hacía las preguntas, yo sólo observaba detenidamente. Sabía que algo andaba mal, no sé, instinto de mujer. Terminó la entrevista, y a mi jefe pareció agradarle, pero yo seguía con dudas.

Llamaron al futuro practicante para que comenzara lo antes posible, llegó a la ofi y pude confirmar lo que indicaba mi instinto femenino: no era para el cargo. Los desastres comenzaron con que su pega fuera simplemente redactar “mail tipos” para posibles clientes… ¿Quién debía revisarlos? Yo. ¿Con qué me encontré? Con unas faltas catastróficas de ortografía, redacción y todo lo que se puedan imaginar. ¡Imposible enviar eso! Y así continuó… yo tenía que corregir una y otra vez lo que hacía el practicante, imposible que entregara algo 100% bien. Entonces, en vez de aliviarme mi carga de pega, yo debía hacer la suya. ¡Horror!

Decidí darle una segunda chance, revisé su malla curricular y vi que pasó un ramo de “Producción de eventos”. ¡Perfecto! Justo debíamos organizar nuestro primer evento y él, como futuro RRPP, podía entender un poco más cómo organizar esto. Fail. Llegó con 1 página de Word, que era supuestamente lo que le había encargado. Me quería morir.

Sí, yo sé que la idea es que él aprenda, pero lamentablemente el chico no tenía buena base… Pretendíamos que fuera una aporte para la ofi y ojalá pudiera quedarse, pero resultó ser una carga más para mí y mis colegas. ¡Menos mal que ya falta poco para que se vaya! Estoy pensando qué nota ponerle en su práctica. Hmmm… obviamente no lo reprobaré, pero tampoco le pondré un 7… ni siquiera un 6.

Y ustedes, ¿han estado a cargo de un practicante? ¿Fue productivo?

Foto CC Vía Wikimedia