Si bien yo nunca me he sentido el juguete sexual de nadie, sí sé perfectamente de qué se trata. Durante aproximadamente un año, fui testigo como mi amigo -un hombre completamente enamorado- fue el juguete sexual de la que fuera su polola durante años.
Todo partió con su ruptura amorosa, producto de una infidelidad de parte de ella. Supuestamente ya no lo amaba ni tampoco sentía atracción por él, por lo que decidió mirar para el lado y serle infiel.
Él quedó devastado, rogándole amor y pidiéndole una nueva oportunidad. Fueron escenas muy tristes: yo lo vi muy mal por varios meses y cuando por fin estaba aceptando su realidad, ella volvió para "conversar".
Así, un día estaba en mi departamento viendo una película y llegó mi amigo muy feliz. Yo no entendía muy bien por qué, aunque sí lo sospechaba. Tanta alegría era producto de que había tenido un "remember" con su ex y aunque él no le dio mucha importancia, era el principio de un sinfín de humillaciones.
Luego del encuentro sexual, él -durante varios días- no supo nada de ella: no le contestaba el teléfono ni tampoco los mensajes de texto que él le dejaba. Mi amigo no entendía nada y nuevamente sintió que la había perdido, pero el día menos pensado ella regresó y buscando nuevamente "sentirse querida y deseada".
Así pasaron meses. Mi amigo incluso se enteró de que ella tenía otra relación y cuando ésta pasaba por alguna crisis, lo llamaba y tenían relaciones íntimas. Él soportaba esta situación porque la amaba, aunque tenía muy claro que no era recíproco.
Él sufrió por mucho tiempo, hasta que comprendió que ella sólo quería encuentros fugaces y que no dejaría su relación actual por él. Sólo lo buscaba con el fin de tener sexo. Así es que sabiamente prefirió eliminarla de su vida.
Ustedes, ¿conocen un caso como éste? O ¿han sido parte de una situación así?
Imagen CC catlovers