La experiencia de ser una mujer adulta gamer

Quienes no gustan o conocen poco de videojuegos, tienden a pensar que son cosa de hombres o niños. Por lo general, observamos a varones vitrineando en la sección gamer en las tiendas de retail, o a papás con sus hijos probando alguna consola. Es por eso que aún no se asume del todo que también existe un público femenino que disfruta estas actividades. Creo que lo anterior se debe - en parte - a que la sociedad sigue siendo algo machista y define identidad de género a través de roles impuestos desde la edad de piedra.

En mi caso, debo agradecer que cuando era pequeña se me diera el espacio para disfrutar de todas las actividades que me llamaban la atención, ya fuera jugar con muñecas, ensuciarme con barro, desarmar cosas viejas o jugar al Super Mario Bros, sin cuestionar si eran cosas "de niños" o "niñas". Por ello, desde la infancia me sentí atraída por los joysticks y las consolas.

En la actualidad soy una mujer que coquetea con las 3 décadas, pero que aún ama los videojuegos. Partí con un Sega Génesis, después tuve una consola "alternativa" llamada Creation (tenía memoria interna con juegos incorporados, que aceptaba cartuchos chinos y de Nintendo), continué con un Super Nintendo, después la Playstation 1, la Play 2 y cuando conseguí pega estable, hace un par de años, mi Play 3.

Voy a las ferias de cachureos y constantemente miro si hay algún "tesoro" retro ñoño; ya sea una consola antigua, cartuchos de videojuegos o figuritas de mis personajes favoritos. Cuando estoy algo más holgada de presupuesto, me compro algún juego nuevo para mi Playstation 3 y espero ansiosa el fin de semana para jugarlo. Uno de mis mejores panoramas de la vida es tener una cerveza en la mano y en la otra mi joystick personalizado de God of War.

Sin embargo, para la mayoría es algo extraño o chocante ver a una mujer comprando este tipo de objetos, ya que creen que una no sabe del tema. Cuando me he acercado a preguntar por algún juego, me han dicho "son juegos de Playstation, no películas" o en otros casos, me han recomendado títulos ultra girly, siendo que mis favoritos son de supervivencia o terror. La última vez que fui a la feria y consulté por el valor de un juego, el tipo me preguntó "¿es para tu pololo?" y resulta que estoy soltera hace años.

Cuando salgo a la calle con mi polera de Mario, sí o sí tengo que estar dispuesta a que me miren raro. Y ahí está el punto que quisiera destacar ¿por que es normal ver a un hombre cuarentón usando ropa con estampado de videojuegos o series? Y cuando se trata de una mujer ¿por qué es mirada de manera extraña o tratada como si no supiera de qué habla? Esta reflexión la podemos llevar a otras cosas, en las cuales los roles de géneros aún siguen influenciando la visión de lo que socialmente es asumido como "gustos de hombre" o "de mujer". Espero que los papás modernos den más espacios a sus hijos y no los encasillen dentro del típico "el azul para niños y el rosado para niñas".

Lo que es a mí, me encanta tener gustos de niño/niña.

En el caso de ustedes ¿alguna se ha sentido encasilladas por su género?

Imagen CC Alex Dram