"La otra semana viajo a Francia y la que sigue me voy en un crucero". "Me compré dos carteras por cien mil pesos, barato". Es típico ver en algunos muros de Facebook estos comentarios.Aquí pueden darse cuenta de las personas que son materialistas, las cuales sólo pasan divulgando dónde viajan o qué se compran. Tienen que estar a la última moda y tecnología.
Por supuesto, también destacan por su competitividad en el trabajo y creerse los dueños de la gente, ya que eso es parte del materialismo porque alude al ¡poder! Y ser más que el otro en todo sentido.
Al menos yo lo encuentro terrible, porque así como conozco a este tipo de gente, también tengo el privilegio de conocer a otros de muy bajo perfil que tienen muchísimo dinero, viajan a mil partes, tienen casas estupendas, ropa a todo trapo, comen en los mejores restaurantes, pero jamás generan envidia en los demás, porque no pasan colocando estos mensajes que denotan una falta de espiritualidad y un vacío tremendo en su interior.
Conversando con un amigo la otra vez nos dimos cuenta de eso, que estas personas quieren pasar siempre por sobre los demás, son seres sumamente orgullosos y “yoistas”. De hecho están todo el rato hablando de ellos y no se dan cuenta que el otro también quiere conversar. ¡No sé cómo sus parejas no se aburren! Jaja.
Por eso jamás les importará si estás feliz trabajando, ya que ellos siempre querrán ser más que tú y te echarán en cara que ellos son jefes o tienen un puesto mayor, o si te compraste un auto de último modelo, porque el de él es mejor y más lujoso.
Y siempre, pero siempre quieren más de lo que tienen, no se conforman con tener todo el dinero, viajar, tener el mejor trabajo o la mejor casa. Y si tú tienes la suerte de tener tu casa, se molestan, incluso te insultan, porque quieren todo para ellos y su mente está enfocada sólo en plata, plata y plata. ¡Qué mal realmente!
Nunca están satisfechos y buscan más cosas, incluso si saben que tú estás mal y les debes algo, igual te piden que les respondas porque necesitan llenarse de lujos y dinero, botar la plata en todo lo que pueda y refregárselo a todo el mundo en la cara.
Por eso cómo me encanta la gente sencilla o como les contaba aquellos que tienen mucho, pero comparten siempre todo, son lindos de alma y de un perfil más piola.
Además cuando nos vamos, todo lo material queda en esta tierra, si bien el dinero es necesario, no hace la felicidad y menos, llenará nuestra alma.
Imagen CC Ronin