Lo vi en Facebook y no lo podía creer: mi ex subiendo la foto de una ecografía. Durante un par de minutos quedé helada. Aunque hace años que no tenemos nada y está completamente superado, fue chocante saber que será papá. Y mucho más al darme cuenta de que la madre es la polola que vino después que yo.
No me cuestiono nada, ya que estoy feliz con mi vida y si la relación terminó, fue por algo. Sin embargo, es imposible no pensar que esa pude ser yo; que si nos hubiésemos conocido en otro minuto de nuestras vidas, más maduros y con las cosas resueltas podríamos estar celebrando la llegada del primer hijo.
A este ex le tengo mucho cariño y me alegro demasiado por él. Aún con ello, continúa siendo fuerte saber que aquel con quien compartiste tantos bellos momentos esté dando un paso así y tú sigas viviendo experiencias similares a las que tenías cuando estaban juntos.
No siento celos, rabia, ni nada parecido. Al menos en la etapa que estoy viviendo, no pretendo tener hijos. En unos meses o un año más la cosa puede cambiar, pero no por ahora. Espero de todo corazón que forme una familia maravillosa y que la mujer que eligió para esto sea quien lo acompañe por el resto de su vida. Pero, ¡uff!, saberlo no fue fácil.
Y ustedes, ¿se han enterado de noticias como ésta?
Imagen CC The Jordan Collective