Aún recuerdo un capítulo de Hey Arnold! -El día de los Inocentes-, donde Helga engaña a Cabeza de Balón y le hace creer que ha quedado ciega por culpa de él, por lo que tendrá que cuidar de ella hasta que se recupere de la visión. Cada vez que veo este capítulo me acuerdo de “MÍ día de los inocentes”.
Cuando tenía aproximadamente 12 años vivía en un condominio, tenía un grupo de amigos donde me gustaba muchísimo un chico, al que llamaremos Carlos. Había un par de indicios y pequeños rumores que me hacían pensar que Carlos sentía cosas por mí, pero yo siempre creí que le atraía otra amiga.
Todo esto sucedió un 28 de diciembre, día de los inocentes. Nos juntamos como siempre en el condominio, con la diferencia que todos estábamos preparados a no creer nada de lo que se nos dijera. Hombres y mujeres estábamos separados, por lo que un amigo se dirige hacia nosotras, dialoga un rato y me dice: Jordana, Carlos quiere juntarse contigo a esos de la 8 debajo del departamento G, le gustas y quiere hablar contigo, quiere saber si irás. Mi corazón se paralizó, creo que dejé de respirar por 2 segundos, me puse roja y no hablé.
Obvio que no creí lo dicho por mi amigo o acaso alguien hubiese creído. Sólo atiné a responder ¿y por qué no viene él a decírmelo? Como respuesta obtuve que Carlos no se atrevía e iría después solo.
No iría a aquella cita, sólo lo haría si él me lo decía. No creía, pero quería creer, moría por ir, me encantaba el chico, pero no quería quedar como tonta.
Pronto serían las 20:00 hrs., sabía que si no iba perdería, pero no quería aflojar, a pesar que todos me alentaron a ir y me juraban que era cierto, que Carlos me estaría esperando a las 8, yo no lograba ceder.
Media hora antes vi a Carlos salir duchadooooo, arreglado y perfumado de la casa de un amigo. ¿Se había arreglado para la cita, en serio? Esto realmente podía ser verdad, mi amigo mensajero, me repetía una y otra vez que fuera. Tenía miedo, orgullo y, no quería hacer el ridículo.
20:00 hrs. Qué debía hacer, ir o no ir. 20:15 hrs. Mis pies no paraban de tiritar, por qué no podía tan sólo ir, pero no, era el día de los inocentes, era obvio que era mentira, ¿o no? 20:30 hrs. Estaba perdida. ¿Por qué esto debía ser el día de los inocentes? 20:45 hrs. Caminé hasta el departamento G… cuando iba llegando me di cuenta que él había estado ahí 44 minutos y yo no llegué!!!!!! No me lo perdonaría 20:46 hrs. Ya era tarde… 20: 47 hrs. Mis manos no podían salir de la cara, qué pena! Me gustaba tanto, soñé con ese momento y el Día de los Inocentes me lo había arruinado. 21:00 hrs. Intenté una y otra vez hablar con él, se rehusó. No quería saber nada más de mí.
… Nunca más hablamos.
Y tú… ¿Has tenido alguna particular experiencia en el Día de los Inocentes?