Los swingers son aquellos que aman con tal libertad, que no tienen problemas en intercambiar parejas a la hora de hacer el amor.
Se trata de intercambios programados - ya sea entre parejas de amigos o totales desconocidos - que se se realizan dentro de un mismo espacio físico. Es decir, hombres y mujeres ven lo que está haciendo la persona que aman.
Se trata de una práctica que aún es algo tabú, pese a lo cual existen sitios en internet en los cuales se contactan parejas dispuestas al intercambio, con objeto de tener sexo más innovador y sin complejos. Algunas de ellas son:
A través de estos sitios web, nos contactamos con dos parejas que han hecho swinger: una llevaba 3 años haciéndolo, mientras que la otra sólo 2 meses. Polo (como ha pedido ser identificado) cuenta que "es una experiencia rica, de sexo liberal, sin compromisos y de común acuerdo en las parejas. Nadie se pone celoso". Margarita, su esposa, agrega: "Nos sirve para salir de la rutina, conocer personas nuevas e incluso hemos forjado amistades entre quienes hacen swinger".
Respecto a la pareja (no casada) que decidió hace sólo dos meses experimentar con estos encuentros, explican que lo hicieron porque su relación "necesitaba un cambio". Dafne comentó que "era todo muy monótono y, cuando un grupo de amigos se enteró de esta crisis, nos recomendaron unirnos a los club de swingers, ya que ellos también lo hacían".
La pareja de Dafne agrega: "Buscamos alternativas para salvar la relación y que ninguno cayera en infidelidades, porque nos amamos. Entonces, esta práctica nos salvó: ninguno se pone celoso y entendemos que es una actividad recreativa, nada más"
Es así como el swinger - o en castellano, intercambio de parejas - es una práctica de la que aún avergüenza contar, pero que no por eso menos frecuente. Es más, según las estadísticas que los sitios relacionados arrojan, son cada vez más las parejas que se suman.
Y tú, ¿qué opinas de esta tendencia?
Imagen CC Fred Seibert