Perdonar es difícil. La confianza se resquebraja, el sentimiento cambia e incluso ver el rostro de la persona que nos falló, puede provocarnos un gran malestar. Pero seamos sinceras: todos nos hemos equivocado alguna vez. Por eso, les daré 5 tips para que este retorno a la reconciliación sea más fácil de llevar.
1. Errar es humano
A veces los seres humanos actuamos por impulsos; no pensamos, nos dejamos llevar y dejamos la embarrada, con las consecuencias que esto trae. Abramos los ojos y recordemos cuando nosotras mismas nos equivocamos y nos dieron ¡un gran perdonazo!.
2. Reconocer el error ya es un gran paso. Valóralo.
Si aquella persona que nos dañó se dio cuenta de que metió las patas hasta el fondo y luego de eso fue capaz de mirarnos a los ojos pidiendo perdón, debemos ablandar un poco ese trizado corazón de piedra. Es muy difícil disculparse y si él (o ella) lo hizo, es porque está consciente de que la embarró y no te quiere perder por nada del mundo.
3. Piensa en todo lo que perderías sin la presencia aquella persona
¿Te imaginas una vida sin él / ella? Si te dolió tanto lo que te hizo es porque realmente te importa, ya sea por la amistad, el amor, las risas, conversaciones o consejos. No perdonarlo significaría echar por tierra cada uno de estos momentos.
4. Pon las cosas en una balanza
De seguro tendrás un listado interminable de cosas buenas versus malas. Seamos sinceras: ¡somos secas para sacar en cara los errores de alguien!, pero lo bueno se nos olvida. Haz este ejercicio y seguro te darás cuenta de que lo positivo pesa más.
5. Espera a que pasen unas semanas antes de tomar la decisión
Si reaccionas inmediatamente vas a actuar bajo el impulso y el dolor, sin tener claro el panorama. Espera una semana- como mínimo - para poder pensar, hacer un análisis, recapacitar y darte el tiempo de escuchar sus descargos, siempre en frío.
Las relaciones humanas son complejas. A veces creemos conocer bien a alguien y que nunca nos fallaría, pero uno comete errores y también hay que saber doblar la mano para no perder una relación cuando ésta de verdad ha marcado nuestra vida.