Nunca faltan esos “amigos” que invitan a salir y una como tiene ganas de conversar un rato, acepta, pero salir nada más, lo que no implica que haya onda, ni siquiera que pretenda que ocurra algo mínimo entre ambos (No, ni un beso, de verdad).
Así, de pronto me veo pasando un rato agradable, tomando y comiendo algo rico, y al par de días este amigo nuevamente pidiéndome que salgamos, y como nunca es malo salir, vamos de nuevo… pero parece que en la mente de algunos muchachos, el hecho de aceptar salir los hace pensar en que hay posibilidades de algo más (así parece que lo interpretan ellos), por lo que no queda otra opción que, en las conversaciones, aprovechar la primera oportunidad para decir “yo estoy súper bien soltera, la verdad es que no me veo con nadie ahora, estoy pasando por una etapa en la que quiero preocuparme de mis cosas y blablablá… y decirlo así como a pito de nada, con una gran sonrisa, como para que se dé cuenta de que NO pasa nada... Pero no sé, me da la impresión de que igual piensan “si está aquí conmigo es por algo, intentaré seguir engrupiendo”… Cuek! (y juro que no coqueteo ni soy calienta sopa!!). Lo peor viene cuando ya después de un par de salidas relajadas, viene la gran invitación: “¿Por qué no vienes este finde a mi depto? Podemos preparar algo rico pa comer y ver películas!” ...Chan!! Y ahí ya te das cuenta de que el tipo te va a tirar toda la carrocería encima. Y no es paranoia, me ha pasado! Ingenuamente he aceptado un par de veces y ahí tienes al tipo abrazado a ti mientras ves la película y dele preparando algún trago para que caigas más rápido (Uhh que mal pensada!). Pero no sé, a mí, de verdad me mata las pasiones esto… Yo sé que debe haber mujeres que les encante, que la oportunidad de tener una aventura con alguien sin compromiso las entretiene, y está super bien, pero a mí no me agrada, menos aún si no tengo un interés amoroso en el sujeto. Y bueno, cuando surge esta invitación, me doy cuenta que es el momento de desaparecer. Excusas sobran: Cansancio, el cumpleaños de la abuelita, ayudar a mi mamá, un carrete de una amiga, etc. Me da lo mismo lo ñoña que sea la excusa, pero filo, arranco!
Así que hombres: Antes de invitar al depto (porque ya sabemos cuál es el motivo de fondo por el que invitan), asegúrense de que haya onda de verdad con la chiquilla, cosa que ella vaya con ganas y dispuesta a todo. De otra manera, no se extrañen si a partir de esa invitación, una empiece a excusarse hasta finalmente, desaparecer…
Enviado por Alejandra Foto CC vía Flickr